"Lo supe cuando hice una obra de teatro a los 9 años. La obra era el "Mago de Oz" y yo hacía de Toto, el perro de Dorothy. Si bien no hablaba, estaba presente toda la obra y hacía cosas graciosas que le causaban mucha gracia al público".

"Lo que más me divierte es que es el trabajo menos rutinario que hay, porque siempre estás haciendo cosas distintas, con gente distinta, en lugares distintos, con ropa distinta, personajes distintos, etc.".

"El valor de la palabra. Ser una persona honesta, sincera y tener palabra es para mí lo más importante. Respetar y cumplir esa palabra, ser leal con uno mismo sobre todo, para después poder serlo con los demás".

"Me defino como una persona miedosa. Le tengo miedo a las responsabilidades, al compromiso y las relaciones estables. Soy muy desconfiado en el amor".

"Soy filoso cuando juego al fútbol y cuando critico. La verdad soy bastante filoso, más que nada cuando me autocritico. Cuando actúo soy de criticarme mucho, soy muy puntilloso".