El conflicto entre Rusia y el Reino Unido por el envenenamiento del ex espía Serguéi Skripal generó una crisis en el partido laborista, cuyo líder, Jeremy Corbyn, fue duramente criticado por sus propios legisladores y vapuleado por la prensa porque se negó a cerrar filas en con la primera ministra, Theresa May.

La prensa conservadora inglesa lo calificó de "marioneta de Putin" y "siervo del Kremlin" por su tibia respuesta a la intoxicación del ex espía y su hija Yulia en suelo británico. 

La polémica creció cuando el portavoz de Corbyn, Seumas Milne, cuestionó el trabajo de los servicios de inteligencia británicos en el caso Skripal y recordó las conclusiones "problemáticas" de las armas de destrucción masiva en Irak. 

Corbyn comenzó a agrupar adversarios el martes de esta semana, cuando recordó en la Cámara de los Comunes los estrechos vínculos entre el Partido Conservador y los empresarios rusos (más de tres millones de euros donados desde la llegada al poder de David Cameron al poder en el 2010). 

Corbyn hizo hincapié además en la necesidad de reunir pruebas y cumplir con el derecho internacional, subrayando el papel de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), con sede en La Haya.

Según Corbyn debe haber evidencia definitiva mientras que muchos de sus diputados creen que debería apoyar la posición de Theresa May, tanto sobre la culpabilidad rusa como sobre la respuesta del gobierno. 

A casi dos años de acaparar la atención del mundo por ser el epicentro de los "Panamá Papers", el estudio jurídico Mossack-Fonseca anunció hoy el cierre de sus oficinas por falta de clientes, como consecuencia del golpe a su reputación que acarreó el escándalo de las sociedades offshore en paraísos fiscales.

El estudio de abogados explicó en un comunicado que "el deterioro reputacional, la campaña mediática, el cerco financiero y las actuaciones irregulares de algunas autoridades panameñas (le) han ocasionado un daño irreparable".

El cierre de las oficinas se formalizará el próximo 31 de marzo, aunque un pequeño grupo de empleados seguirá trabajando puertas adentro para finalizar con trámites administrativos, atender a autoridades y antiguos clientes, explicaron en el documento, según consignó la agencia de noticias EFE.

Al menos seis personas murieron y varias resultaron heridas al derrumbarse en Miami un puente para peatones que conectaba el paso con la zona donde está ubicada la Universidad Internacional de Florida (FIU), informaron hoy medios locales.

La agencia italiana ANSA consignó que son al menos seis los muertos, pero se teme que el número pueda aumentar.

Imágenes transmitidas por la televisión muestran una gran sección del puente derrumbado atravesado sobre esa calle y con varios vehículos atrapados debajo de la estructura.