La líder opositora bielorrusa Svetlana Tijanovskaya anunció el inicio de las huelgas programadas para el día de hoy con el propósito de exigir la salida del presidente Alexander Lukashenko.

Tras un nuevo domingo transcurrido con otra gran manifestación contra el Gobierno en Minsk, la capital del país, desde esta mañana, empleados de empresas y fábricas públicas, del sector de transportes, los mineros, profesores y estudiantes empezaron a hacer huelga.

Vale recordar que Bielorrusia es escenario de protestas sin precedentes desde que Lukashenko, en el poder desde 1994, fuera reelecto el 9 de agosto en elecciones que la oposición, Estados Unidos y la Unión Europea, entre otros actores, consideran fraudulentas.

Tijanovskaya, quien tras esos comicios se transformara en la principal figura de la oposición bielorrusa se encuentra actualmente exiliada en Lituania.

Desde allí fue que lanzó este mes un ultimátum al mandatario, a quien dio hasta el domingo 25 de octubre para que se retire, bajo la amenaza de convocar una gigantesca manifestación y una huelga general.

En las redes sociales y medios opositores podían verse videos que muestran a decenas de jóvenes congregados ante las universidades, o participando en sentadas.

Según la ONG Viasna, más de 100 personas fueron detenidas solo hasta el mediodía, sobre todo en Minsk.

Ante esto, la Unión Europea está dando un apoyo bastante sólido a la democracia en Bielorrusia, preparando sanciones para todos los involucrados en falsificar las elecciones así como en la posterior represión.

El caso de Rusia, más relevante, todavía no termina de quedar en claro. Quizás porque una alternativa sea la de mantenerse al margen como se hizo en Armenia allá por  2018. 

Pero lo cierto es que Bielorrusia es más importante que Armenia, al menos para Putin y quizás por esto el presidente haya dicho en las últimas horas que está preparado un escuadrón especial en caso de que las cosas se salgan de control.