El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires lanzó una grave acusación contra el Gobierno nacional, a propósito de la sobrepoblación en las comisarías porteñas. Todo se desencadenó a partir de la fuga de cuatro personas -dos ya fueron recapturadas- de una comisaría de Chacarita.

El conflicto no es nuevo. La administración que conduce Horacio Rodríguez Larreta denuncia que el Servicio Penitenciario Federal (SPF), que depende del Poder Ejecutivo, no recibe a detenidos de la Ciudad, por lo que deben ser alojados en comisarías "que no están preparadas ni tienen la función de recibir presos".

El ministro de Seguridad porteño, Marcelo D'Alessandro, dijo que detrás de la decisión se esconde la intención de perjudicar a la Capital Federal y reveló una conversación que mantuvo con María Laura Garrigós de Rébori, interventora del SPF. "Me dijo: 'El problema que tenés es la política criminal que llevás adelante, si dejás de detener, no vas a tener problemas con los detenidos en las comisarías'", contó. "Es indignante", consideró el funcionario.

"Nosotros no tenemos duchas, no tenemos condiciones para que reciban a sus abogados, incluso no tenemos los alimentos calóricos necesarios para suministrarles", señaló el ministro, en declaraciones a radio Mitre. Y alertó: "Hay 1500 policías que en vez de estar cuidando a los vecinos en las calles, están en las comisarías cuidando presos y no fueron entrenados para eso".