Carolina Pochetti, viuda del ex secretario privado de Néstor Kirchner, Daniel Muñoz, amplió su declaración indagatoria ante el juez Claudio Bonadio en la causa surgida a partir de las anotaciones del chofer Oscar Centeno. La mujer, detenida desde hace varios meses, busca ser aceptada como arrepentida.

El magistrado había ordenado esta madrugada la detención del ex abogado de Pochetti, Miguel Angel Plo, en relación al entramado de lavado de dinero que se le adjudica a quien fuera secretario del ex presidente Kirchner y su entorno.

Pochetti llegó a Comodoro Py 2002 a media mañana desde la cárcel de Ezeiza y luego de reunirse con su defensor oficial, Juan Martín Hermida, ingresó al juzgado de Bonadio custodiada por el Servicio Penitenciario Federal.

La detenida ya firmó un acuerdo para ser aceptada como imputada colaboradora con los fiscales del caso Carlos Rivolo y Carlos Stornelli, pero el juez aún no lo homologó y la citó para ampliar sus dichos.

La acusación contra el abogado

El rol de Plo en la trama de lavado de dinero por 70 millones de dólares que se adjudica a Pochetti y su entorno fue uno de los temas sobre el que habló otro arrepentido, el ex secretario de Hacienda de Santa Cruz en la gobernación de Kirchner, Juan Manuel Campillo.

Campillo sigue detenido en el caso porque el juez se negó a excarcerlarlo y ahora eso se debate en la Cámara Federal porteña.

Al declarar como arrepentido aludió al presunto rol central que tuvo el abogado Plo en las maniobras de compra venta de inmuebles en Estados Unidos y el destino que se le dio a ese dinero y sostuvo que el letrado cobró honorarios por una suma multimillonaria.