Con el objetivo de terminar con la incertidumbre de la presencialidad y el conflicto entre Nación y Ciudad, el Frente de Todos presentó este jueves un proyecto de ley en la Legislatura porteña. De esta manera, aseguran, se dará una seguridad a las familias.

El proyecto sugiere un sistema de autocontrol de la presencialidad de clases e implica que la presencialidad se permita "siempre y cuando haya menos de 200 casos semanales cada 100.000 habitantes en la Ciudad". El objetivo es "superar la discusión sobre la presencialidad y darle certidumbre a las familias", afirmó el diputado Leonardo Santoro en un hilo de Twitter.

La norma establece que si se supera ese número, "automáticamente las clases pasan a modo virtual, hasta que la tasa de incidencia descienda de 200 casos". "Estos parámetros permitirán definir los días viernes, la modalidad de enseñanza de la semana subsiguiente", explicó Santoro.

En sus redes sociales, el funcionario nombró como antecedente de esta norma a una similar existente actualmente en Alemania. "Criterios similares tomaron también nuestros países vecinos. Uruguay suspendió la presencialidad con 252 casos cada 100.000 hab. Paraguay lo hizo con 178 casos y Chile con 167. La Ciudad tiene, al día de hoy, 683", agregó.

Asimismo, Santoro sostuvo que "la evidencia demuestra que la presencialidad aumenta la movilidad y, con ella, los contagios. En marzo, los viajes diarios en transporte público del AMBA fueron 22,3% superiores a los que había antes de la presencialidad".

"De esta manera, no hay más lugar para peleas políticas ni enredos judiciales. El indicador propuesto está abierto al debate. Lo importante es encontrar una herramienta técnica que permita dar por superada la confrontación irracional en CABA", concluyó el lesgilador.