El papa Francisco continúa resfriado. Este viernes ha celebrado con normalidad la misa matutina en la capilla de su residencia, la casa Santa Marta, pero ha decidido suspender la audiencia prevista al mediodía con los participantes en un congreso en el Vaticano.

"El papa Francisco celebró la misa y al final, como es habitual, saludó a los participantes, pero decidió suspender las audiencias oficiales en agenda para este viernes. Las reuniones previstas en Casa Santa Marta continúan regularmente", ha informado Matteo Bruni, portavoz del Vaticano.

El jueves Francisco, de 83 años, no acudió a la basílica de San Juan de Letrán en Roma para asistir a la liturgia penitencial con el clero de Roma por una "leve indisposición", como explicó Bruni. Sin embargo, el Pontífice mantuvo una audiencia con los miembros del Movimiento Católico Global para el Clima y otras dos reuniones privadas.

El Papa apareció en la audiencia del miércoles ya algo resfriado y, por la tarde, celebró la misa para la imposición de la ceniza y la tradicional procesión desde la basílica de Santa Sabina a la Iglesia romana de San Anselmo, en la colina romana del Aventino.