Silvina Tornati, la mujer que, junto a su esposo, defraudó a la Obra Médico Asistencial (IOMA) en 2016, fue encontrada muerta en una vereda de la ciudad estadounidense de Miami Beach por motivos aún no esclarecidos.

Su cadáver, hallado el sábado 9 de febrero, se encontraba sobre la acera frente a un edificio, por lo que la principal hipótesis que se maneja hasta el momento es que se habría caído desde un balcón.

Una vez hecho el descubrimiento, la Policía local dio aviso al Consulado argentino en Miami que, a su vez, notificó a los familiares de la fallecida.

De acuerdo a lo apuntado por una familiar de la víctima, se desconocen aún las circunstancias en que se produjo la muerte. Mientras tanto, aguardan la cremación del cuerpo -que sería en Miami- para luego repatriar los restos.

El caso

Tornati, oriunda de la localidad bonaerense de Tandil, estaba envuelta en una causa judicial por haber estafado a IOMA por $58.000. Quien fuera su marido, Julio Alberto Tamburelli, era dueño de una empresa de internación domiciliaria que funcionaba en esa ciudad, llamada Flonic SRL.

A través de ella, y según relató el fiscal de la causa Jorge Paolini, la pareja "en su calidad de socios de la firma mencionada defraudaron al IOMA mediante la presentación de documentación falsa, que daba cuenta de la prestación de un servicio de internación para la afiliada María Luisa Sánchez, el cual nunca se llevó a cabo ni tampoco había sido solicitado por la paciente". 

Por esta prestación, la obra social le había abonado $58.000 a la firma. Ambos fueron detenidos en octubre y excarcelados un mes después, tras pagar sus respectivas fianzas de $30.000.