La vida de estos cuatro tigres de bengala cambió para siempre cuando el veterinario egipcio Amir Khalil, especialista en animales salvajes y director de desarrollo de proyectos de la organización internacional Four Paws, que se dedica al rescate de animales en condiciones de vida insalubres, conoció la historia de estos felinos y empezó a diagramar la posibilidad de trasladarlos a un santuario de vida silvestre en Sudáfrica.

El 12 de marzo, luego de más de 70 horas e viaje, arribaron a la Fundación Four Paws donde Sandro, Mafalda, Messi y Gustavo sintieron el pasto bajo sus patas por primera vez...pues vivieron durante 15 años en el interior de un vagón de tren ubicado en un campo cercano a la localidadde Justo Daract, a 140 kilómetros de la capital de San Luis. 

Dos de ellos habían sido abandonados por el dueño de un circo y tiempo después se agregaron dos cachorros que lo único que conocieron fue ese vagón-jaula. 

En estos momentos se encuentran saboreando la sensación de libertad por primera y vaya que es una experiencia nueva para ellos. Ya no podrán salir a cazar (perdieron el olfato) pero sí mantenerse sanos, revolcarse, jugar, nadar y caminar. 

Tras una semana de su llegada al santuario los tigres se muestran relajados, experimentando nuevas sensaciones y sabores. Adaptándose a su nueva vida en cientos de metros cuadrados de tierra fresca.

 "Aún tienen mucho camino por delante para aprender sobre la zona y el nuevo territorio", destacó Khalil.