Crear una experiencia segura y privada para los jóvenes en Instagram, y al mismo tiempo divertida, trae grandes desafíos. La plataforma busca que este grupo mantenga contacto con las personas que son importantes para ellos y se mantengan al día con temas de su interés, sin que tengan que lidiar con mensajes directos o comentarios no deseados de extraños.

“Creemos que las cuentas privadas son la opción correcta para ellos, pero reconocemos que algunos creadores jóvenes quieren tener cuentas públicas para poder construir sus comunidades”, señala la red social.

El objetivo es encontrar el equilibrio adecuado, y ofrecer a los jóvenes todo lo que les gusta de Instagram y mantenerlos seguros. Por eso, a partir de hoy:

• Las cuentas de los jóvenes vendrán configuradas como privadas de forma predeterminada
• Dificultaremos que las cuentas potencialmente sospechosas contacten a los jóvenes
• Limitaremos las opciones que tienen los anunciantes para llegar a los jóvenes con publicidad

Una experiencia más segura y privada

En la medida de lo posible, la plataforma busca evitar que los jóvenes contacten con adultos que no conocen o de los que no quieren saber. “Consideramos que las cuentas privadas son la mejor manera de evitar que esto ocurra. Por eso, a partir de esta semana, todos los menores de 16 años (o de 18 en algunos países) tendrán de forma predeterminada una cuenta privada cuando se unan a Instagram”, explican.

Las cuentas privadas permiten controlar quién ve o responde a tu contenido. Si tenés una cuenta privada, las personas tienen que seguirte para ver tus publicaciones, Historias y Reels. Quienes no te sigan tampoco pueden comentar tu contenido y no podrán verlo en espacios como Explorar o hashtags.

Históricamente, la red social ha pedido a los jóvenes que elijan entre una cuenta pública o una privada cuando se registran en Instagram por primera vez, pero una investigación reciente mostró que aprecian una experiencia más privada. Durante las pruebas, ocho de cada diez jóvenes aceptaron la configuración privada por defecto durante el registro.

A los jóvenes que ya tienen una cuenta pública en Instagram, se les mostrará una notificación en la que se destacan las ventajas de una cuenta privada y se les explicará cómo cambiar su configuración de privacidad. “Seguiremos dando a los jóvenes la opción de cambiar a una cuenta pública o mantener su cuenta actual pública si así lo desean”, agregan.

“Aunque la mayoría de las plataformas han fijado los 13 años como edad mínima de participación, no existe un interruptor que haga que alguien esté listo en este momento. Poner las cuentas en privado para los menores de 16 años fomenta que los jóvenes se sientan cómodos, confíen en sí mismos y adquieran la capacidad de ser ciudadanos digitales durante sus primeros años y desarrollar hábitos que durarán toda la vida”, dijo Larry Magid, CEO de ConnectSafely.

"Estas nuevas actualizaciones representan un paso importante hacia la creación de una experiencia más segura y privada para los jóvenes en Instagram. En particular, el uso del aprendizaje automático para entender cuándo podría no ser apropiado que un adulto interactúe con un adolescente da a los jóvenes el control para elegir con quiénes interactúan, y el hecho de establecer cuentas privadas de forma automática a los adolescentes menores de 16 años los ayuda a mantener su contenido menos visible para los adultos", añadió.

Detener el contacto no deseado

Animar a los jóvenes a tener cuentas privadas es un gran paso hacia la dirección correcta cuando se trata de detener el contacto no deseado por parte de adultos. Pero la plataforma irá un paso más allá y hará que las cuentas de los jóvenes sean difíciles de encontrar para ciertos adultos.

“Hemos desarrollado una nueva tecnología que nos permite encontrar cuentas que han mostrado un comportamiento potencialmente sospechoso y evitaremos que estas interactúen con las cuentas de los jóvenes”, explican. “Comportamiento potencialmente sospechoso" comprende, por ejemplo, a cuentas de adultos que pueden haber sido bloqueadas o denunciadas recientemente por alguien joven.

Gracias al uso de esta tecnología, ahora la red no mostrará a la cuenta de estos jóvenes a estos adultos en Explorar, Reels o "Cuentas sugeridas para ti". Si encuentran sus cuentas buscando el nombre de usuario, no podrán seguirlos. Tampoco podrán ver los comentarios de los jóvenes en las publicaciones de otras personas, ni podrán dejar comentarios en sus publicaciones. La plataforma seguirá buscando otros lugares para implementar esta tecnología.

Estos cambios estarán disponibles en Estados Unidos, Australia, Francia, Reino Unido y Japón, y pronto podrían llegar a más países.

"Es bueno ver que Instagram está utilizando soluciones tecnológicas para minimizar las oportunidades de descubrir cuentas de menores por parte de adultos que se comportan de forma sospechosa en la aplicación. Se trata de un gran paso para seguir construyendo sobre el trabajo realizado a principios de este año para prevenir que adultos no conocidos puedan enviar mensajes a menores. Aprecio la nueva política de poner las cuentas de los menores de 16 años como privadas de forma predeterminada. Solemos recomendar a los adolescentes que configuren todos sus perfiles en las redes sociales como privados para que tengan un mejor control sobre quién puede ver lo que publican. La configuración por defecto de la cuenta privada simplemente tiene sentido cuando los adolescentes exploran los límites de lo que quieren compartir y con quién hacerlo", indicó Justin Patchin, Co-director de Cyberbullying Research Center.

Cambiar el modo en que los anunciantes pueden llegar a los jóvenes

De igual forma, Instagram cambiará la forma en que los anunciantes pueden llegar a los jóvenes con sus anuncios. A partir de las próximas semanas, los anunciantes sólo podrán dirigir su publicidad a personas menores de 18 años (o mayores en determinados países) en función de su edad, sexo y ubicación. Esto significa que las opciones de segmentación disponibles anteriormente, como las basadas en intereses o en la actividad en otras aplicaciones y sitios web, ya no estarán disponibles para los anunciantes. Estos cambios serán globales y se aplicarán a Instagram, Facebook y Messenger.

“Creemos en mostrar a las personas anuncios relevantes para que puedan descubrir y comprar los productos que les interesan. Para mostrar a las personas los anuncios más relevantes, los anunciantes eligen el tipo de personas que quieren que vean sus anuncios. Esto puede incluir la elección de mostrar sus anuncios a personas con ciertos intereses (como el baloncesto) o con base a la información que ellos -u otros socios- comparten con nosotros sobre su actividad en su sitio web y aplicaciones. Es decir, información como si alguien puso un determinado par de zapatos en su cesta de compra o buscó una nueva parrilla de verano”, indicaron.

Instagram ya ofrece la posibilidad de que los usuarios indiquen que prefieren no ver anuncios basados en sus intereses o en sus actividades en otros sitios web y aplicaciones, por ejemplo, a través de los controles de la configuración de anuncios.

Sin embargo, algunos especialistas han señalado que este grupo no está bien preparado para tomar estas decisiones. Por eso, la plataforma adoptará un enfoque más cauteloso en la forma en que los anunciantes pueden llegar a los jóvenes con los anuncios.

Una vez que cumplan 18 años, Instagram le informará a estos usuarios acerca de las opciones de segmentación que los anunciantes pueden utilizar para llegar a ellos y las herramientas disponen para controlar su experiencia con anuncios.

Mirada hacia al futuro

“Queremos que los jóvenes disfruten usando Instagram, sin comprometer nunca su privacidad y seguridad. Seguiremos escuchándolos, también a sus padres, a los legisladores y a los expertos para construir una experiencia en Instagram que funcione para los jóvenes y genere confianza entre los padres”, adelantó la red social.

"La estrategia de Instagram para eliminar de forma proactiva las posibles amenazas es una innovación que se agradece; los adolescentes tienen derecho a explorar sus redes sociales libremente sin tener que preocuparse por los agresores. Aunque los adolescentes suelen ser conscientes de los riesgos que conlleva compartir información personal, a menudo son menos ‘conocedores’ en lo que respecta a la configuración de la privacidad. Que las cuentas de los menores de 16 años sean privadas de manera predeterminada les permite adaptarse y aprender a gestionar su privacidad sin restringir en absoluto su libertad", Janice Richardson, Asesor internacional de Insight SA, experto del Consejo de Europa