Italia perdió 20.000 millones de euros en el sector de turismo, hostelería y restauración, que representa el 13% del PBI del país, por la pandemia de coronavirus y registró desde marzo 81 millones de turistas menos que en el mismo mes del año anterior.

Después de sufrir 218.268 infectados y 30.395 muertos, uno de los países más castigados por el coronavirus, está estabilizando la curva con una tendencia de contagios cada vez menor y quiere reactivar su economía. "El impacto económico entre marzo y mayo es dramático, con una pérdida estimada de 20.000 millones de euros para hoteles, restaurantes, transporte y compras", lamentó Coldiretti, la mayor asociación de empresarios agrícolas del país.

El primer ministro, Giuseppe Conte, reveló que este verano europeo los ciudadanos saldrán de vacaciones a recorrer el país y no lo pasarán encerrados porque significaría una pérdida aún mayor. "Este verano no seguiremos en los balcones y la belleza de Italia no permanecerá en cuarentena. Podremos ir al mar, a las montañas y disfrutar de nuestras ciudades", expresó.

"Podremos ir al mar, a las montañas y disfrutar de nuestras ciudades"

Además, agregó: "Sería bueno que los italianos pasaran sus vacaciones en Italia, incluso si lo tenemos que hacer de otra manera, con reglas y precauciones". Asimismo, la asociación de hoteleros de Italia Federalberghi confirmó que este año perderán el 71% de los ingresos estimados una cifra de 17.000 millones de euros repartidos en unos 300 millones de turistas menos.

El Poder Ejecutivo fue notificado para que autorice ya la reapertura de las más de 24.000 hoteles rurales repartidos por el territorio nacional, que en 2019 alojaron a 14 millones de turistas. "Si a nivel epidemiológico la situación permanece bajo control, podremos acordar algunos avances con las regiones. Lo importante es actuar sobre la base de un control continuo, porque pagaríamos costes enormes si cometemos imprudencias", indicaron.