El ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, se refirió a la situación de los tres jugadores de Los Pumas sancionados por sus comentarios racistas y discriminatorios y aseguró que si bien la sanción es "ejemplar", hay un problema que es "mucho más profundo".

"Hablé con el presidente de la UAR porque esto me preocupa muchísimo y porque no es nuevo. La sanción es ejemplar pero el problema es mucho más profundo", sostuvo en declaraciones a Futurock. 

"La solución no va a estar solo en el castigo, esto del rugby es mucho más profundo y tenemos que trabajar mucho", subrayó el funcionario, quien relacionó este episodio con el asesinato de Fernando Báez Sosa, ocurrido a principios de este año en Villa Gesell.

"Venimos de un año que arrancamos con el asesinato de un chico a manos de rugbiers", recordó.

Lammens no es el primer funcionario que se refiere a esta situación. 

Tras el episodio, la titular del INADI, Victoria Donda, dijo que "estos tuits muestran que el racismo sí anida en Argentina" y sostuvo que la UAR "tiene que tomar cartas en el asunto".

Además, desde el organismo que dirige emitieron un comunicado y expresaron su preocupación y repudio frente a los dichos y plantearon que “es hora de terminar con el racismo y la discriminación en el deporte”.

Luego de los posteos xenófobos y racistas en Twitter que salieron a la luz en las últimas horas, Pablo Matera, Guido Petti y Santiago Socino fueron suspendidos por tiempo indeterminado por la Unión Argentina de Rugby (UAR), que no descartó más sanciones para los tres jugadores. Además, se le revocó la capitanía del equipo a Matera, quien fue citado por la directiva del Stade Francais, el club donde se desempeña.