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Parejas en cuarentena: ¿se producen más crisis o más reencuentros?

Vivir en aislamiento genera altibajos emocionales constantes que hacen que te reencuentres con vos mismo, pero que también te veas en una situación diferente frente a tu pareja. Por eso charlamos con la licenciada Beatriz Goldberg para que nos adentre un poco más en el tema.

Parejas en cuarentena: ¿se producen más crisis o más reencuentros?

En cuarentena el día a día se puede llegar a tornar mucho más difícil, o más fácil, de acuerdo a que tan bien nos podemos adaptar a esta nueva forma de vida, desconocida hasta el momento.

Una forma de vida que sin dudarlo potencia al máximo tu lado positivo y tu lado negativo. Tenemos frecuentemente picos de emociones a los que no estábamos acostumbrados a someternos, de hecho varias emociones pueden llegar a ser nuevas para muchos de nosotros, o por lo menos poco exploradas.

Estas emociones y sentimientos no solo nos van a modificar a nosotros como individuos, sino también a quien tengamos al lado o con quien estemos manteniendo una relación, así sea a distancia. Por eso, la pregunta es: ¿Qué pasa con las parejas en situaciones de aislamiento social?

Obviamente, como nos señala la licenciada Beatriz Goldberg "siempre hay que tener en cuenta de qué tipo de pareja estamos hablando". Si nos referimos a un tipo de pareja simbiótica, una pareja que está acostumbrada a hacer todo de a dos, podemos decir que "van a tener menos dificultades a la hora de convivir en cuarentena", aunque si por el contrario están en casas separadas, quizás este contexto traiga problemas para ellos.

Ahora, si hablamos de aquellas parejas que por lo general tienen sus rutinas individuales muy estructuradas, la convivencia puede llegar a ser el problema para ellas. En este caso, la licenciada recomienda que cada uno respete sus tiempos para cada cosa. Si les toca trabajar, que lo hagan en ambientes separados, como así también que entrenen, lean, etcétera, en distintos horarios y en distintas partes de la casa, para que luego se produzca el reencuentro.

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"Lo importante es que se puedan hacer cosas individuales y cosas de pareja. Es bueno que se dividan bien las tareas en el hogar, por ejemplo", destaca Goldberg, y agrega: "Hay que combinar espacios para poder organizarse y es fundamental tener tiempo con uno mismo".

"Si hay hijos, los niños llevan mucha atención. En ese caso aparte de organizar los espacios individuales y de pareja, también hay que conciliar con los pequeños. Eso sí, no hay que descuidar la pareja, hay que encontrar momentos para estar a solas, no solo en el aspecto sexual, sino también en la parte afectiva, de charla, y demás", apunta la psicóloga.

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Pero ojo, no todo es negro. "A veces las crisis hacen que se despierten ciertas cosas y se repacten aspectos de la relación. Pueden ser oportunidades para mejorar la pareja, para charlar más, para compartir cosas en común porque tienen más tiempo para estar juntos", señala Goldberg.

En el caso de la distancia, ésta "no siempre afecta a la pareja, también la puede potenciar". El no verse puede hacer que "se idealice lo que es estar con el otro", que se generen "otros tipos de coqueteos. Por ejemplo está recomendado el sexo virtual, aunque eso va a depender de lo que cada uno esté acostumbrado", de todos modos nunca viene mal reinventarse.

Y otro gran punto es que "estos momentos en que uno está muy movilizado por todo lo que está pasando, son los momentos claves para acompañarse (por más de que sea de modo virtual), y en más de un caso ese compañerismo, ese sostén, puede convertirse en amor, y aunque no lo crean formarse -potenciales- parejas aún estando en cuarentena".

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Por lo que, en conclusión, todo es muy relativo, nada puede ser certero en estos casos, cuando en realidad la incertidumbre es la que reina en el mundo entero. Que existan más crisis o más reencuentros va a depender de qué tan bien estemos cada uno con uno mismo y de cuánto realmente queremos respetar, acompañar y compartir con el otro.