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¿Por qué suben los precios en la indumentaria y otros productos?

La cámara sectorial atribuyó el aumento de precios a la variación del tipo de cambio y a las dificultades logísticas ocasionadas por la pandemia.

¿Por qué suben los precios en la indumentaria y otros productos?
La suba en el sector de indumentaria ronda alrededor del 60%.

Desde la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), señalaron que debido a la dismunición en la demanda y consumo en contexto de pandemia, se produjo una suba de precios en prendas de vestir. 

Alicia Hernández, gerente general de la Cámara Industrial Argentina de la Indumentaria (CIAI), argumentó al respecto que la suba no se evidencia en la ropa "de marca" -que en los últimos 12 meses registra un aumento de entre el 35% y 42% interanual, alineado con la inflación general-, sino en el segmento masivo e informal, que representa alrededor del 60% del mercado.

Esta suba arroja uno de los mayores incrementos en el segmento masivo e informal. Por otra parte, "lo mismo ocurrió con otros bienes de la economía de origen importado, como las computadoras (98,5%) y los autos (64,3%)", explicó la entidad.

A pesar de la disminución de circulación y consumo, y la baja de persianas de los negocios durante varios meses, la suba del dólar "impacta transversalmente en todo el mercado porque encarece los insumos productivos (fibras de algodón y sintéticas, hilados y tejidos), cuyos precios están prácticamente dolarizados".

Otra variante a tener en cuenta en estos incrementos, son los problemas de logística y abastecimiento debido a la paralización de múltiples actividades:

"En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires recién se pudo volver a fabricar ropa desde el 3 de agosto, lo que significa que los talleres formales estuvieron cerrados prácticamente cuatro meses y medio, mientras en la mayoría de los municipios del Conurbano bonaerenses se abrieron sólo unas semanas antes", explicó la CIAI.

Desde el sector, aseguraron que muchas empresas están trabajando con el mínimo de personal, ya sea por casos positivos de Covid-19 y por la disminución de trabajadores exceptuados por enfermedades pre existentes (mayores de 60 años o responsables del cuidado de menores). Esto también generó un encarecimiento en los costos productivos de las fábricas en asegurar el traslado propio hacia el lugar de trabajo.

A pesar de que la reapertura es lenta y paulatina, desde el sector afirman que de a poco se irá recuperando los niveles de producción óptimos y normales.

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