La Justicia le dictó hoy la prisión domiciliaria a Claudio Rímolo, el taxista que protagonizó un violento incidente de tránsito en el barrio porteño de Villa Urquiza. La secretaría de Transporte porteña ya le había suspendido su licencia profesional para conducir.

El fiscal Norberto Brotto, tras indagar al chofer como imputado de los delitos de "lesiones" y "daños", determinó su prisión preventiva por lo que esperará monitoreado con una tobillera electrónica el juicio en su contra.

El hombre corpulento, que lucía una campera de cuero y una gorra, ingresó a la Fiscalía Penal Contravencional y de Faltas número 2 poco antes de las 9 entre los periodistas y movió sus brazos de forma intempestiva para hacerse paso e ingresar a la sede judicial , a la  que llegó acompañado de su abogado y sin hacer declaraciones.

El fiscal Brotto citó a Rímolo para indagarlo por el incidente de tránsito en el que, delante de su esposa y su pequeño hijo, el viernes a la mañana se peleó con un automovilista, al que intentó embestir con el taxi marcha atrás tras lo cual se escapó a toda velocidad.

Por ese hecho que se registró en la esquina de las calles La Pampa y Combatientes de Malvinas, Rímolo está imputado por los delitos de lesiones y daños, que tienen una pena acumulativa prevista de 2 años de cárcel. 

Según trascendió, no es la primera vez que el taxista debe comparecer ante la Justicia, dado que carga con antecedentes por robo, resistencia a la autoridad, uso de armas y hurto. 

En tanto, según adelantó en declaraciones formuladas a la prensa, el conductor agredido, Fabio Rojas, acusará ante la Justicia a Rímolo de "tentativa de homicidio".