La toma de posesión de Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela despertó tensiones y rechazos plenos como pocas veces ha generado un presidente en América Latina.

La erosión de los ejes sociales, políticos y económicos, las limitaciones en el ejercicio pleno de la democracia y un cierto consenso político regional que busca aislar al sucesor de Chávez son algunos de los puntos que explican en parte los motivos por los cuales un gran número de países decidieron no reconocer el mandato de Maduro.

“El mundo es más grande que el imperio estadounidense y sus satélites. Aquí está presente ese mundo", manifestó el mandatario ante las delegaciones que asistieron a la ceremonia.

Lo cierto es que en las horas transcurridas durante la jura del presidente y sus posteriores palabras, tuvieron un desarrollo paralelo orquestado donde desde las redes oficiales, una batería de anuncios dieron inicio a una agenda de aislamiento y rechazo para Venezuela. Las consecuencias e implicancias restarán por verse.

Mario Abdo, presidente de Paraguay, publicó un documento de 12 puntos titulado “Ruptura de relaciones diplomáticas con Venezuela”.

Mauricio Macri se refirió a su par como “el victimario que se victimiza”. Sostiene además que "Nicolás Maduro hoy intenta burlarse de la democracia. Los venezolanos lo saben, el mundo lo sabe. Venezuela vive bajo una dictadura".

Chrystia Freeland, ministra de Relaciones Exteriores canadiense, comunicó que “Canadá rechaza la legitimidad del nuevo mandato presidencial de Nicolás Maduro”.

Mike Pompeo, Secretario del Departamento de Estado norteamericano planteó que el país condena la usurpación ilegítima del poder e insta a los que apoyan al régimen venezolano, incluidas las fuerzas de seguridad juradas a apoyar la Constitución, a dejar de permitir la represión y la corrupción.

Sebastián Piñera aclaró que su país no reconoce el régimen ilegítimo de Maduro en Venezuela: "Entregamos nuestro absoluto respaldo a la Asamblea Nacional e instamos a Maduro a transferir de forma provisional el Poder Ejecutivo para q convoque pronto nuevas elecciones democráticas, libres y transparentes".

Federica Mogherini, vicepresidenta de la comisión de la Unión Europea, sostuvo en representación del bloque que "la UE lamenta profundamente que el Presidente maduro esté comenzando hoy un nuevo mandato sobre la base de elecciones no democráticas". 

En último término, paralelamente a las declaraciones en cuestión, el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) acordó en "no reconocer la legitimidad del período del régimen de Nicolás Maduro”.