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Robaron cuatro millones de pesos del Ministerio de Desarrollo Social de Santa Cruz

Las cámaras de seguridad registraron el ingreso de dos delincuentes que se llevaron el dinero que estaba guardado en una caja fuerte y que pertenecía al departamento de Tesorería.

Robaron cuatro millones de pesos del Ministerio de Desarrollo Social de Santa Cruz
Ministerio de Desarrollo Social en Río Gallegos (Google Maps)

Se llevaron 4 millones de pesos del Ministerio de Desarrollo Social de Santa Cruz que estaban guardados en una caja fuerte y pertenecían al departamento de Tesorería. El robo se descubrió el miércoles a las 6 de la mañana, cuando un encargado de seguridad encontró destrozos en el interior del edificio ubicado en la calle Salta 75, en Río Gallegos. 

Fueron al menos dos los delincuentes que entraron al lugar por una de las ventanas que están por detrás del Ministerio. Una vez adentro, dañaron con aerosol las lentes de ocho cámaras de filmación, provocaron un desorden generalizado en el sector Tesorería y arrancaron una caja fuerte. No pudieron ser identificados ya que estaban con barbijo y encapuchados. 

La sustracción del dinero se llevó a cabo durante la madrugada y aprovecharon el momento justo en el que no había ningún guardia porque el edificio acababa de ser desinfectado para evitar la propagación del coronavirus. Por esta razón los investigadores creen que los asaltantes tenían información privilegiada o habían hecho un trabajo de inteligencia previo.

En el lugar además se hizo presente personal de la División de Investigaciones Zona Sur, que comenzó a buscar cámaras de seguridad en los alrededores del edificio público, con el objetivo de establecer si los dos sujetos que protagonizaron el robo se encontraban solos o contaron con la ayuda de un tercero para huir con el dinero.

Esa misma noche, las únicas personas que habían ingresado al Ministerio habían sido los profesionales encargados de desinfectar las instalaciones, quienes se fueron al terminar su trabajo, por lo que el inmueble quedó sin una guardia hasta las 6 de la mañana, cuando debían comenzar su jornada los empleados provinciales.