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Se cumplen 33 años de la caída del Muro de Berlín

El Muro de Berlín ha sido el protagonista indiscutible de la historia del Siglo XX. Dividió a Alemania en dos durante 28 años. Su caída propició la reunificación alemana y el reencuentro de miles personas que estuvieron separadas por casi tres décadas.

Se cumplen 33 años de la caída del Muro de Berlín

Hoy se cumplen 33 años de la caída del Muro de Berlín, que se construyó para separar la parte controlada por la URSS en la capital de Alemania, de las zonas que estaban bajo la administración de Inglaterra, Francia y los Estados Unidos. No sólo estaba dividida esta ciudad, sino toda la nación. 

La división del país germánico resultó de los acuerdos de Yalta, que tuvieron lugar en febrero de 1945, cuando ya era claro que Alemania perdería la Segunda Guerra Mundial. En la misma participaron los jefes de Estado Winston Churchill de Inglaterra, Franklin D. Roosevelt de Estados Unidos y Josef Stalin de la URSS.

Como resultado de las reuniones entre estas potencias, la ciudad de Berlín, Alemania y gran parte de Europa quedó dividida en dos grandes bloques. En uno se siguió una política económica con semejanza a la que predominaba en Rusia de planeación estatal, mientras que en el otro lado se siguió el esquema de mayor libertad en el funcionamiento de los mercados. 

La construcción del muro

Desde un principio, la parte occidental de Berlín tenía un mayor crecimiento económico, lo cual propició una fuerte emigración de la población. Se estima que 3.5 millones de alemanes orientales huyeron de la parte controlada por los soviéticos, es decir la República Democrática Alemana (RDA) a la denominada República Federal de Alemania (RFA). Este porcentaje era equivalente al 20 por ciento de la población.

Miembros de la "Stasi", el Ministerio para la Seguridad del Estado, trabajando sobre el Muro de Berlín.

Ante la pérdida de población, la República Democrática Alemana decidió la noche del 12 de agosto de 1961 levantar un muro provisional de 155 kilómetros que separaba las dos partes de la ciudad.

Este muro se volvió el símbolo de la llamada Guerra Fría y de la separación de Alemania y de Europa. La frontera interna de Alemania tenía vallas, torres para vigilantes, una zona de 5 kilómetros de ancho reservada para aquellos que tuvieran un permiso de residentes, además de los 500 metros de ancho de zona prohibida y una barrera de 10 metros.

Entre los años 1961 y 1989 miles de personas intentaron cruzar el muro, de las cuales se estima que murieron alrededor de 100.

Así lucía el Muro de Berlín luego de su construcción en 1961.

Eran las mismas familias y la misma historia, el mismo clima y el mismo suelo pero separadas por dos administraciones totalmente opuestas entre sí.

En aquella época había una lucha ideológica sobre qué sistema económico era más conveniente para lograr el desarrollo de las naciones. Sin embargo, el colapso económico de los países de Europa Oriental que utilizaban la planeación y control del gobierno sobre los procesos productivos demostró la ineficiencia de este sistema.

La caída del Muro

El jueves 9 de noviembre de 1989, en una rueda de prensa, Günther Schabowski, dirigente de República Democrática Alemana, hizo saber a los periodistas extranjeros que los ciudadanos orientales podían salir del país a través de los puestos fronterizos. La orden entró en vigor de inmediato y muchísimas personas se dirigieron al muro de Berlín, donde los guardias fronterizos no hicieron nada para contener la avalancha, y cruzaron a la República Federal Alemana.

El muro cayó y multitudes de alemanes derribaron la pared pieza por pieza usando sus manos, picos, mazos y palas en una tarea que llevó un par de días de trabajo, pero que simbolizó la libertad materializada para toda la nación.

La caída del Muro de Berlín no sólo fue la destrucción de una instalación que separaba una ciudad y un país, sino también la caída y fracaso de un sistema que a pesar de todos los esfuerzos y presiones, no logró imponerse en la sociedad alemana.