A la espera de que llegue la ayuda humanitaria, un producto que generó tironeos entre el gobierno y la oposición por el rol de las Fuerzas Armadas en su distribución, la frontera de Venezuela con Colombia fue el centro de un clima de enorme tensión. 

A dos días del festival musical Live Aid Venezuela y con una caravana de dirigentes opositores -con Juan Guaidó a la cabeza- hacia el Estado de Tachira, fronterizo con Cucutá, agentes de la Guardia Nacional Bolivariana intentaron detenerlos y agredieron a políticos y ciudadanos. 

Los opositores esperan ingresar este fin de semana la ayuda humanitaria y comenzar a distribuirla entre quienes tienen riesgo de vida. El gobierno de Maduro lo considera un "show" y teme que sea el primer paso de una invasión militar. 

En el mismo día, un intensísimo jueves, el chavista anunció el cierre total de la frontera terrestre con Brasil y la restricción del espacio aéreo para todo tipo de aviación. 

La medida también va en línea con la estrategia de imposibilitar por todos los medios el ingreso de la ayuda humanitaria. 

Por ahora la cúpula de las Fuerzas Armadas todavía apoya al gobierno del Partido Socialista Unido, aunque la dimisión del diputado Hugo Carvajal, ex jefe militar de Inteligencia aumenta la presión. 

La Federación Rusa por su parte, también muestra su apoyo a Maduro, como él mismo lo anunció a través de su cuenta de Twitter, con la compra de medicamentos e insumos médicos, que sirven para superar minímamente la emergencia social del país.