El caso tuvo lugar días atrás, precisamente el martes 29 de octubre alrededor de las 10:30 de la mañana, en el barrio Guadalupe de la ciudad de Santa Fe: un joven de 17 años interceptó a una señora de 73 en la calle para arrebatarle una bolsa, pero ella terminó ofreciéndole su monedero ya que no llevaba consigo nada de valor. Un policía que custodiaba un camión de gaseosas salió a correrlo y le disparó por la espalda, terminando con su vida.

Hoy, ese efectivo policial, el inspector Francisco Aldo Olivares, está acusado de homicidio calificado por el uso de arma de fuego, por alevosía y por abusar de su función como integrante de las fuerzas de seguridad. 

La víctima fatal de este hecho es Lautaro Saucedo, un muchacho que, se constató, iba desarmado. El video se difundió en las últimas horas y generó todo tipo de reacciones.

La mujer que figura en la filmación declaró ante las autoridades que Saucedo la abordó diciéndole 'Dame la bolsa'. Tras un breve forcejeo, ella le explicó que allí no llevaba nada de valor sino catálogos de maquillaje que entregaba por el barrio para hacer unos pesos. 

En las imágenes se ve cómo el joven comienza a retirarse después de escuchar a la señora, que termina ofreciéndole dinero para que pueda comprarse algo de comida. Él aceptó y se fue. También se ve cómo Olivares sale corriendo -vestido de civil- a ultimarlo.

El caso de este inspector es particular: su carrera está atravesada por numerosos delitos (apremios ilegales, abuso de autoridad, uso de exceso de violencia en detenciones) y fue sancionado y hasta suspendido. Ahora, se enfrenta a una posible expulsión de la fuerza y cadena perpetua.

Hay otro punto que complica a Olivares: según el testimonio de la mujer, ella le dio al chico entre $180 y $200, pero entre las pertenencias de Saucedo sólo se hallaron $35. Dos testigos declararon haber visto al autor del disparo tomar el dinero y dejar los últimos billetes junto al cuerpo del joven.

Además de esto, al momento del asesinato se encontraba trabajando ilegalmente como efectivo de seguridad privada, empleo para el que se precisa una autorización de la Jefatura de Policía provincial a través de los Servicios de Policía Adicionales si se quiere realizar paralelamente.

La Justicia considera que Olivares rompió con todos los aspectos del protocolo policial al ni siquiera dar la voz de alto ni tampoco identificarse. Para las autoridades judiciales, es un claro caso de 'gatillo fácil'. Se estima que en unos pocos meses se podrá determinar la expulsión del inspector Olivares.