Supertrapito es el nuevo héroe de Guillermo. Tiene de sidekick a una botella de detergente verde, freestylea y tiene como archienemigo a la grasa de los platos y los hongos de la bacha y el inodoro. Pero, en su nacimiento, hay algo más que un simple muñeco de trapo y los cassettes donde se lo ve en acción.

Creado de imprevisto por Virginia Sánchez (Jimena López), la madre de Guillermo, e impulsado por su mejor amiga Silvia Farabutto (Valeria Stilman), Supertrapito ve la luz para que Guillermo se haga cargo de los quehaceres del hogar. Sin embargo, cuando Virginia se entera de que Silvia usaba a Guillermo como sujeto de prueba, surge un quiebre artístico estilo Stan Lee y Steve Ditko.

Mockumentary dirigido por Agustín di Bella, Supertrapito, ambientado a fines de los 80, es tierno, baja un mensaje interesante y nos da una escena final que dibuja en nuestro rostro una sonrisa involuntaria. A XX años de su estreno, CINEAR la agregó a su catálogo y, por eso, desde Filo.news entrevistamos a su di Bella y a Valeria Stilman.

"Trabajar en el corto fue muy lindo", arranca Valeria, que le llegó la propuesta por Guillermo Sánchez, el creador de los títeres y el guionista de la obra. Además, Sánchez había sido alumno de Valeria en unas clases de improvisación que ella había impartido. "De casualidad, la coprotagonista, Jimena, es amiga mía, entonces fue como una excusa para compartir tiempo".

"Jime y Vale fueron fundamentales", asoma Di Bella, desde su casa y tomando una infusión con su taza adornada con el logo de Supertrapito. "Tienen mucho oficio las dos. Sus propuestas, en relación a generar ese volumen al personaje, eran aciertos".

De hecho, cuando el periodista las entrevista, Valeria confiesa que hubo mucha improvisación. Pero, ¿por qué alguien las entrevista? ¿Qué hizo Guillermo para que, años más tarde, un periodista necesite esa información?

"Yo creo que porque el proyecto trascendió de alguna manera. Nosotros sentíamos que, tal vez, lo que hacían en la casa eran pilotos y después se convirtió en un programa más", argumenta Di Bella. "Y por sentimos que, años después, le hacían un documental a esos orígenes".

Los superhéroes, se sabe, son el resultado del pensamiento y las exigencias que tiñen una época. El ejemplo más cabal es el del Capitán América, creado en marzo de 1941, algunos meses antes del ataque a Pearl Harbor y de la entrada de Estados Unidos a la Segunda Guerra.

Capitán América triunfó por eso: por ser un supersoldado aplastando al ejército de Hitler, que era lo que el estdounidense promedio quería (y necesitaba) ver. Se necesitaba, al menos en ese entonces, exacerbar el espíritu patriótico norteamericano.

Supertrapito, en ese sentido, a fines de los 80, responde a un mensaje claro que hoy lo tenemos impregnado: los quehaceres del hogar son responsabilidad de todos. Virginia, cansada de llegar a su casa y tener que ordenar los juguetes que Guillermo había desparramado, le da vida a Supertrapito y hace que su hijo se haga cargo de sus desastres.

"Yo creo que acá hay que ir viendo qué es lo que plantea el universo del corto... especialmente Silvia. Ella dice: '¿Por qué consumimos determinados productos que tienen hábitos o bajadas de línea que no están tan buenos y no los cuestionamos? ¿Y por qué cuestionamos esto?", recoge el director.

Lo que argumenta, va por el lado de lo desconocido: al calor de los años que corrían, no era típico o esperado que un hombre limpiara el hogar. Por eso, quizás, Virginia lo rechaza en un principio. "Lo que Silvia propone está piola, digo... ¿por qué no incorporamos estos hábitos?"

"Hay que cuestionar los malos hábitos. En este caso se tomó este ejemplo, pero me parece que apunta a tomar cualquier mal hábito. A cuestionar qué consumimos, qué vemos...".

Ahora, el problema que pone sobre la mesa el corto es... el cómo. Sí, está bien que los más chicos sepan desde temprana edad que si ensucian o rompen algo, son ellos quienes tienen que arreglarlo. Pero, ¿qué pasa con la forma de inculcárselo de Silvia?

"Lo que cualquier madre decida por su hijo está bien. Cada madre sabe lo que necesita su hijo", empieza Valeria. "Ahora, mi personaje... no. Hay un punto en el que no estuvo bien porque lo hizo a escondidas de su amiga".

Peeero, eso no es todo. "Si no hubiera sido así, me parece que está muy bien, desde un producto masivo, inculcar hábitos saludables. Lo que está muy mal es que seamos tan obsecuentes con algo que vemos en la tele desde pequeñes".

¿Existe la posibilidad de ver algo original de Supertrapito? ¿Algo propio de sus aventuras contra la mugre hogareña?

"Cuando estaba escribiendo el guión con Guillermo, un profesor me dijo que, para él, era una serie. Este... en principio te diría que no", sentencia Di Bella.

Mientras tanto, podés ver el corto, de forma gratuita, en CINEAR haciendo click acá.