Marcelo Gallardo no quedó conforme con el resultado ni el funcionamiento que tuvo River en el empate por 1 a 1 ante Atlético Tucumán en el Monumental. No solo se lo vio inquieto al Muñeco durante el encuentro, sino que después del partido, fue categórico a la hora de hacer un análisis del juego.

"Hoy era un partido en el que teníamos todo para pasarla bien y la terminamos pasando para el culo. Es el resumen del análisis que tengo para hacer del partido", se sinceró el Muñeco en la conferencia de prensa. Y agregó: "No la pasamos bien, teníamos todo para pasarla bien, nos desconocimos, no nos encontramos, no pudimos encontrar el funcionamiento, no pudimos aprovechar el resultado a favor. Ellos patearon un tiro al arco y nos hicieron un gol".

En esa línea, el entrenador millonario afirmó que deberán realizar una autocrítica para dar vuelta la página de cara a lo que viene. "La verdad es para hacer un retiro espiritual esta noche y pensar en mañana. Cuando pasa lo que pasó hoy uno se siente mal, pero de todas maneras hay que seguir y eso es lo que intenté transmitir en el vestuario. No podemos jugar como jugamos hoy y hay que olvidar todo lo que fue esta tarde. Hay que hacer una autocrítica como siempre y lo haremos una vez más como lo hacemos en cada partido cuando no nos gusta lo que vemos".

Correctivo en pleno partido

Una imagen que sorprendió en pleno partido fue la reacción que tuvo Gallardo con Marcelo Herrera, cuando el lateral derecho intentó capturar, si éxito, un cambio de frente muy comprometido. El técnico le pegó un cachetazo en la espalda a su dirigido, mientras le gritaba: "¡Que no pique! ¡Que no pique!".

Sin embargo, en la conferencia de prensa, el técnico minimizó la el episodio con una sonrisa. "Sabía que la pelota iba a picar y salir. La vi venir... Resolver situaciones de afuera es muy fácil. Fue una caricia en la espalda, si le hubiese querido dar un correctivo, se lo hubiera dado bien. Me la agarré con el pobre de Herrera, que es más bueno...", sentenció Gallardo.