Israel Folau, una de las grandes estrellas del rugby australiano, no se arrepintió de sus comentarios homofóbicos y eso le trajo una terminante consecuencia: las autoridades australianas decidieron rescindirle su millonario contrato y expulsarlo de la Selección.

Esta decisión impactará en los planes de los Wallabies de cara al próximo Mundial que se disputará en Japón entre el 20 de septiembre y el 2 de noviembre.

¿Qué dijo?

"Borrachos, homosexuales, adúlteros, mentirosos, fornicadores, ladrones, ateos, idólatras; el infierno les espera ¡Arrepiéntanse! Solo Jesús puede salvarles", escribió Folau en su cuenta de Instagram.

Al jugador de 30 años le dieron este lunes 48 horas para aceptar la medida. De lo contrario, deberá presentarse a una audiencia por infringir el Código de conducta. Según la Federación Australiana, el jugador "cometió un violación de alto nivel de Código de Conducta de Jugadores Profesionales y por ello se termina su contrato de trabajo".

A pesar de tener a la Asociación de su país en contra, Folau no se mostró preocupado. "Primero y por encima de todo, ahora vivo para Dios. Cualquier cosa que Él quiera que me ocurra, creeré que sus planes para mí serán mejores que cualquier cosa que pueda pensar", sostuvo.