Rafael Nadal intentará continuar con su hegemonía en los torneos de polvo de ladrillo cuando enfrente esta mañana desde las 10 a Novak Djokovic por la final de Roland Garros, el Grand Slam que se disputa en París y que es televisado por ESPN.

En los últimos 15 años, el español levantó el título en 12 participaciones y en esta ocasión, se enfrenta al número 1 del mundo, quien es quizá en estos momentos, el único tenista capaz de destronarlo.

En lo que trascurrió del torneo, Nadal no perdió ni un set y hasta el momento eliminó al bielorruso Egor Gerasimov (83), al estadounidense Mackenzie Mc Donald (236), al italiano Stefano Travaglia (74), al norteamericano Sebastian Korda (213), al italiano Jannik Sinner (75) y en semifinales al argentino Diego Schwartzman (14).

El serbio, por su parte, le ganó a al sueco Mikael Ymer (80), al lituano Ricardas Berankis (66), al colombiano Daniel Elahí Galán (153), al ruso Karen Khachanov (16), al español Carreño Busta (18) y al griego Stefanos Tsitsipas (6), todos rivales de mayor jerarquía.

La primera participación del multicampeón de 34 años fue en 2005, cuando campeonó por primera vez tras ganarle la final al argentino Mariano Puerta. Desde aquel momento, mantiene un récord de 99 victorias y apenas dos derrotas, lo que lo establece como el mejor tenista sobre polvo de ladrillo de la historia.

Si levanta este trofeo, alcanzará 85 en total y será el vigésimo Grand Slam, igualando así la marca de Roger Federer, quien está recuperándose de una lesión en la rodilla para volver al circuito.

Pero este gran dominio no asusta a Djokovic, quien tiene unos números similares: conquistó 81 títulos, 18 de ellos de Grand Slam y uno solo en Roland Garros, en la edición de 2016.

En los enfrentamientos entre ambos, el serbio está por delante con 29 victorias contra 26 al cabo de 55 duelos.