Vicky Xipolitakis viene arrasando en el certamen de cocina Masterchef en donde se luce con sus platos noche a noche. Sim embargo en la última gala no le fue nada bien y terminó llorando. 

Pero una vez concluído el desafío y presentado su plato y tras la desilusión del jurado que no quedó conforme con la tarea realizada por la griega, ella con el carisma que la caracteriza intentó congeniar con Germán Martitegui. Con quien desde el comienzo del certamen se tiran indirectas y buena onda. 

Luego, al ser consultada por Santiago del Moro sobre si el apellido finalizaba con “s” o no, Vicky aclaró: “Con ‘s’ final, Xipolitakis”, y de forma pícara puntualizó: “Para que nadie se lo olvide termina en ‘kis’”, haciendo referencia a la palabra “ kiss” que en inglés dignifica “ beso”.

“Acordate Germán cómo termina, eh”, le dijo a Martitegui, quien hasta este momento no había intervenido en la conversación, a lo que el jurado respondió con un seco “me acuerdo”.

Fue entonces cuando la griega adelantó: “Pará, tengo una pregunta para Germán, saliendo de esto, ¿se la puedo preguntar?”, pero Donato la cortó en seco: “No es el momento Vicky. Hacemos esto y después terminás los besos”, le dijo haciendo referencia a su apellido.

Luego se dieron las respectivas devoluciones que no convencieron al jurado pero ella a pesar de su alta desilución porque estaba convencida que lo había hecho bien, insistió con su pregunta y, si bien quiso hacer una humorada, todo le jugó en contra: “Le puedo preguntar algo a Germán que me quiero sacar la duda, saliendo de la cocina, perdón, pero esto es un trauma mío que tengo hace mil años y que nadie me la contesta”.

Y ante las miradas atónitas de los jurados y el conductor, lanzó: “Siempre que veo alguien que es calvo quiero sacarme esta duda, ¿hasta dónde se lavan la cara los pelados?”.

Tras aclarar que su consulta no fue un chiste, Martitegui se limitó a responder esbozando una floja sonrisa: “No es mi papel contestar eso, Vicky”.