El fiscal Carlos Rívolo pidió restringirle las llamadas telefónicas a Fernando Sabag Montiel, acusado del intento de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, días después de que el imputado brindara una entrevista a un canal de televisión.

"Dada la gravedad institucional de los hechos objeto de la presente pesquisa, y con el exclusivo fin de preservar su seguridad, habré de sugerir al Tribunal que se disponga restringir las comunicaciones que reciba el detenido en el establecimiento carcelario, a su defensa y/o allegados autorizados específicamente por él", solicitó el fiscal en un pedido elevado a la jueza federal María Eugenia Cappuchetti.

Preso desde el 1° de septiembre del año pasado, cuando intentó dispararle en la cara a la ex presidenta cuando ésta arribaba a su domicilio en Recoleta, Sabag Montiel pasa sus días alojado en el sector de Área de Observación Continua (AOC), en la celda N° 01 dependiente del Servicio Psiquiátrico para Varones. Así se desprende de un informe del Servicio Penitenciario Federal. El acusado, además, hace meses que no quiere recibir la visita de su abogado.

En diálogo con C5N, Sabag Montiel aseguró que actuó solo y dijo que no se arrepentía de lo que hizo la noche del 1° de septiembre. Estas declaraciones las habría hecho desde un teléfono celular al que accedió en el penal.

Días después, escribió una carta desde la cárcel en la que acusó a la vicepresidenta de tener "comprados" a los abogados oficiales que lo representan. "Me rompieron el celular en la PSA y me robaron mis instrumentos musicales y mis tres automóviles. Coimearon a Leandro Ulliarte, el padre de Brenda Ulliarte. CFK le dio una casa para tenernos secuestrados", dijo.

Denunció que lo tienen "secuestrado" y que no lo dejan comunicarse con nadie ni le permiten recibir visitas y afirmó: "Me quieren hacer desaparecer y echarle la culpa a Mauricio Macri".