Luego de la salida de Rubén Insúa por malos resultados en la Copa de La Liga Profesional que propició el arribo de Leandro Romagnoli, San Lorenzo sufrió un nuevo traspié con la suma de tres nuevas inhibiciones que le prohibirán incorporar nuevos futbolistas en el próximo mercado de pases.

A pesar de que la noticia circuló ayer por la tarde, en la dirigencia de la institución de Boedo ya estaban al tanto del caso de Adam Bareiro, uno de los futbolistas más valiosos del actual plantel, por el cual la deuda asciende a US$600.000. 

Por el lado del futbolista paraguayo, el club parece tener todo resuelto ya, pero el viernes pasado aparecieron tres nuevos casos en el sitio web oficial de la FIFA en el que se informan las sanciones por el incumplimiento en el plan de pago con Diego Rodríguez por US$490.000, otro incumplimiento en el pago al Xolos de Tijuana por el "Torito", por US$160.000, y una deuda con Ferencváros de Hungría por Carlos Auzqui, que alcanza los US$140.000.

A partir de la suma de los tres nuevos casos, que asciende a US$1.400.000, San Lorenzo permanece inhabilitado para incorporar futbolistas en el próximo mercado, situación que podrá revertir si abona el total de la deuda. Para resolver el problema y eliminar la inhibición, la gestión actual busca llegar a un acuerdo entre las partes.