El estallido de la pandemia generó además de la urgente necesidad de abordar la problemática y el contagio de miles de personas en el mundo, que se alteraran diversos planes y proyecciones para este año.

Y las bodas son uno de tantos ejemplos. Esto lo vivieron Romanee y Sam Rondeau-Smith una pareja británica que tenía pautado su casamiento para mediados de julio, lo que debieron posponer debido al aislamiento social. 

Un mes después,  aún con las restricciones de circulación vigentes, decidieron organizar la celebración que trascendió por una cuestión particular: representaron la presencia de muchos de sus amigos y seres queridos mediante figuras de cartón de tamaño real.

La idea surgió a partir de una normativa que permitía la presencia de sólo 14 personas, diferencia con las 100 que pensaban invitar. Sin embargo, el puntapié surgió a partir de una anécdota: "Una de mis amigas vive en Nashville y no podía asistir al casamiento, por eso propuso en broma enviarnos su foto de cartón a tamaño real".

 "Y pensamos: ¿por qué no hacerlo con nuestros invitados?", contó Romanee al diario Metro. La propuesta le gustó a la organizadora de la boda, quien encargó 48 figuras de cartón para reemplazar a los invitados que no podían asistir.

"Fue perfecto. Fue realmente relajante. No estuvimos decepcionados para nada. Estoy segura de que en algún momento haremos una gran fiesta", sostuvo Romanee. Las imágenes alcanzaron notable difusión y repercusión a través de las redes sociales como anécdota que deja la pandemia.