Cinco niños fallecieron y otros cuatro resultaron heridos de gravedad este jueves durante una fiesta escolar de fin de año producto de un accidente con un castillo inflable. Ocurrió en la localidad de Devonport, norte de la isla de Tasmania en Australia.

Los niños, alumnos de quinto y sexto grado de una institución educativa de la zona, celebraban el fin de las clases en una fiesta para que se instaló un gran castillo infable. De un momento a otro, una fuerte ráfaga de viento alzó al castillo por el aire a 10 metros de altura.

Los menores de entre 10 y 12 años cayeron desde dicha altura y cinco de ellos murieron mientras que otros resultaron seriamente heridos. Aún no trascendió cuantos chicos estaban en el inflable al momento de la tragedia, ni cómo estaba amarrado al piso.

Las víctimas fueron atendidas con urgencia con ambulancias aéreas que llegaron a la zona. Cuatro chicos murieron en el acto mientras que la quinta víctima fatal falleció en el hospital. Los heridos siguen hospitalizados, según medios locales, en condiciones críticas.

Un vecino y testigo de los hechos, contó a un medio local que vio al castillo elevarse y luego reportó que se escuchó un fuerte estallido. “Fue traumático”, concluyó. En las imágenes registradas por medios autralianos se logran ver trozos de la tela del inflable colgando de ramas de árboles de la zona.

"Todos estamos de luto por su pérdida. Nuestros corazones están destrozados por las familias y los seres queridos, compañeros de escuela y maestros de estos jóvenes que se fueron demasiado temprano", dijo el jefe de la policía de Tasmania, Darren Hine a ABC News.

Por su parte, el primer ministro Scott Morrison calificó el incidente como "devastador": "Niños tan pequeños disfrutando de un día de diversión al aire libre que se convirtió en esta horrorífica tragedia. En esta época del año, simplemente nos rompe el corazón", aseguró y se puso a disposición de las familias afectadas.