El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires sumará 100 agentes a los 300 que ya realizan tareas de control en centros de trasbordo, subtes, metrobuses y principales corredores de colectivos para contener la circulación de personas por el coronavirus.

"Continúan las mismas medidas restrictivas: en el transporte público viajan trabajadores esenciales y empezamos implementar a partir de estas 48 horas un control más intensivo en conjunto con la Provincia y el Gobierno nacional", dijo Juan José Méndez, secretario de Transporte porteño esta mañana.

A esta altura, la circulación por las autopistas porteñas está en la mitad del número habitual antes de la pandemia y la cuarentena. Ese número tuvo un aumento de 13% en una semana y llegó a 37.000 autos. 

Méndez aseguró en diálogo con Radio Continental que tras la reunión con sus pares de Nación y Provincia acordaron reforzar los controles a la mañana en el Gran Buenos Aires y por la tarde en la Ciudad de Buenos Aires.

"Hacemos un llamado a la responsabilidad individual, si se tienen los permisos tenemos la responsabilidad de mantener el distanciamiento social en el viaje y si un colectivo viene lleno, hay que dejarlo pasar y tomar otro", dijo.