En el marco del impulso por la aplicación de nuevas dosis, un estudio determinó que la eficacia de las terceras dosis de las vacunas de Pfizer y Moderna disminuye del 87 al 66% al cuarto mes. Mientras que baja al 31 desde el quinto mes de su administración.

Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos detallaron que esta última cifra es "imprecisa", dado que aun no hay mucha gente que haya recibido la tercera dosis hace más de cinco meses.

En este sentido, fueron estudiadas 93.000 hospitalizaciones y más de 240.000 visitas a urgencias relacionadas con Covid-19 en 10 estados estadounidenses entre agosto de 2021 y enero de 2022, y cubre a la vez las olas de las variantes Delta y Ómicron.

Asimismo, explicaron que en Ómicron la eficacia contra las hospitalizaciones era de 91% para quienes recibieron su tercera dosis en los dos meses, pero caía a 78% luego de cuatro meses, aunque el CDC afirma que un porcentaje "sigue elevado".

De esta manera, estos resultados "refuerzan la importancia de consideraciones suplementarias acerca de dosis adicionales, para mantener o mejorar la protección contra el Covid-19". Ante estas situaciones, se confirma que es muy posible que las personas vulnerables, como las personas mayores o inmunodeprimidas, necesiten a futuro una cuarta dosis.