Gustavo Alfaro volvió a referirse al clásico que Boca jugó con River en El Monumental, donde fue muy criticado su planteo de salir a defenderse y cuidar el cero en el arco. 

"Me pegaron a más no poder, me han criticado, pero tenía claro el partido que tenía que jugar y dónde tenía que jugarlo. Más que nada porque fue el primer clásico después de la final del año pasado", dijo Alfaro en referencia a la Libertadores de 2018. 

Ese domingo Boca jugó muy cerca del arco rival y tuvo muy pocas chances de hacerle un gol a River, pero la mayoría de las críticas se basaban en que no podría jugar de la misma manera la fase de semifinales que jugarán River y Boca en octubre.

"Fuimos a jugar el partido que teníamos que jugar. A mí no me incomoda que me critiquen, el foco se puso donde yo quería que esté, si perdíamos hubiesen hablado de los jugadores", agregó el técnico de Boca. 

Por último, en conferencia de prensa luego de la victoria a Estudiantes, que estiró a diez los partidos sin recibir goles por parte del equipo, Alfaro dijo que "no iba a ser el partener del festejo de nadie", en referencia a la hinchada de River.

El próximo superclásico será el 1 de octubre por la idea de la semifinales de la Copa Libertadores en El Monumental, mientras que la vuelta se jugará el 22 de octubre en La Bombonera.