Martín Ocampo, ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, se reunión con encargados de la seguridad de ambos clubes y coincidieron en solicitar a CONMEBOL el cambio de horario para el partido, adelantando el mismo por una hora, por cuestiones de seguridad.

Para el mismo, se había informado que cerca de 2000 efectivos de la Policía de la Ciudad se iban  a hacer cago del operativo, que será más grande que el que se realizó en el partido de ida debido a que uno de los dos se coronará campeón en el Monumental.

Sin embargo, Futbolistas Argentinos Agremiados se metió en la discusión y pidió que no se modifique el horario pautado por los organismos de la Copa Libertadores, y toda la responsabilidad cae en el ente internacional, que aceptaría el pedido del gobierno porteño.

Con esta modificación, el pitazo inicial del uruguayo Cunha sería a las 16 horas, aunque se espera el comunicado oficial que informe de manera definitiva el cambio de horario.