Diego Schwartzman mostró una cara que no esperaba en Monte Carlo y no logró superar su primer duelo, pero rápidamente se puso en mente retornar por la senda ganadora y continuar defendiendo su lugar en el Top Ten en el ATP 500 de Barcelona, donde tená una dura parada inicia.
El estadounidense Frances Tiafoe aparecía en el recuadro y se vieron las canchas en el último turno de Godó, en un partido que no comenzó de la mejor manera para el "Peque", que cayó en el primer parcial por 6 a 3, sin poder encontrar un rumbo claro, perdiendo puntos importantes y determinantes.
Jugando a todo o nada, el segundo set tuvo otro perfil más parecido a lo que se esperaba del duelo y fue obligado a llevarlo a un séptimo juego, en donde el argentino logró romper la monotonía del resultado y sentenció el 7-5 con un envión anímico vital y dejando atrás el ritmo del norteamericano.
Sin espacio a la competencia, el "Peque" stuvo sólido con su saque y aprovechó las oportunidades de quiebre para aplastar por 6 a 1 a Tiafoe y sentenciar su lugar en los octavos de final del torneo catalán, en donde se verá las caras con el frances Corentin Moutet, quien se cargó al británico Daniel Evans.