Ayer sábado 7 de marzo se registró en Argentina la primera muerte por coronavirus: el paciente, identificado como Guillermo Abel Gómez, de 64 años, había viajado a Francia y regresado el pasado 25 de febrero. 

Ante esta situación, el ministro de Salud Ginés González García descartó modificaciones en las medidas de prevención por el momento: "Las medidas cambiarían más cuando hubiera evidencia de diseminación, de circulación del virus. Ahí es cuando empiezan las medidas con cierres de espectáculos, como en el norte de Italia, por ejemplo. Pero para eso tiene que haber virus circulando en la sociedad. Hay más de 90 países que tienen algunos casos, pero solamente seis están tomando este tipo de medidas de cierre de espectáculos", dijo en declaraciones al diario Clarín.

Intentando poner paños fríos a la situación, el funcionario nacional aclaró que la víctima fatal presentaba varias patologías previas al contagio, como "antecedentes de diabetes, hipertensión, bronquitis crónica e insuficiencia renal".

"Ahora no tenemos ninguna posibilidad que no sea un caso importado; es lo que está pasando todavía"

Por otro lado, González García aseguró que "la Argentina está preparada y tomando todas las medidas necesarias para afrontar el coronavirus", aunque advirtió que "nadie puede decir que no vaya a haber más casos".

El sábado por la mañana, antes de que se conociese el caso fatal, el titular de la cartera de Salud había recomendado una "cuarentena domiciliaria" durante 14 días a todas las personas que regresaran de países afectados por el epidemia, como Italia, España, Alemania y Francia.