"Estamos muy sentidos, lamentamos lo sucedido". La expresión es de Claudio Vignetta, funcionario provincial y miembro del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) de Córdoba. A raíz de lo que sucedió en el caso de Solange Musse, una jovén que falleció de cáncer sin poder despedirse de su padre y tía, que habían viajado desde Neuquén a Córdoba para realizar el encuentro. 

Vignetta planteó que lo que se hizo fue cumplir el protocolo. "Se le hizo el test rápido para intentar ayudarlo. Le dio positivo, lo que indicaba que posiblemente podía tener Covid-19. Por lo tanto se le hizo retornar a su provincia". Ese test se le realizó en Huinca Renancó, en el límite entre Córdoba y La Pampa, cuando ya había hecho 1000 kilómetros y lo hicieron retornar el mismo día, junto a su cuñada, quien tiene domicilio en Alta Gracia, y padece de una discapacitada motriz.

"Si le permitíamos el ingreso poníamos en riesgo a la población de Alta Gracia", definió Vignetta. 

Por su parte Carlos Musse, papá de Solange, dice que pidió que le realizaran el hisopado para tener la certeza ante el test que arrojaba un resultado "dudoso", y se lo negaron ordenándole que regresara bajo custodia policial. 

En Huinca Renancó les realizaron el test a los dos. El de su cuñada dio negativo pero el suyo fue "dudoso". "Me hicieron otro y dio igual. Nunca me tomaron la fiebre, no me quisieron hacer el hisopado. Nunca pude hablar con ninguna autoridad, solo con las dos chicas del puesto sanitario y la policía", dijo el hombre indignado. 

Según sus dichos, ni siquiera le dieron la opción de quedarse en uno de los hoteles reservados para quienes deben hacer la  cuarentena, sino que "ocho móviles policiales" lo acompañaron durante todo el camino de regreso a Neuquén. Fueron "postas" de patrulleros entre las distintas provincias.

Finalmente se supo que el hisopado que se realizó Carlos dio negativo, por lo tanto no era portador del virus.