Neymar, exjugador de Barcelona y actual estrella de PSG, enfrentará desde mañana y hasta el 31 de diciembre un juicio oral en la ciudad catalana por cargos de corrupción en la irregular transferencia desde Santos al club catalán en 2013.

A casi un mes del comienzo de Qatar 2022, la figura del conjunto dirigido por Tité podría ser condenado a una pena de dos años de cárcel y una sanción económica de casi 10 millones de euros, pedido por la Fiscalía ante la querella interpuesta en 2015 por la empresa brasileña DIS, la cual era dueña de los derechos económicos del pase.

Además, también serán juzgados sus padres, los expresidentes del FC Barcelona Sandro Rosell, Maria Bartomeu, y el exdirigente del Santos Odilio Rodrigues Filho. Los restantes acusados son tres entidades jurídicas: el FC Barcelona, el Santos FC y la empresa fundada por los padres del jugador.

La declaración del brasilero está prevista para el viernes 21 o 28 de este mes. Barcelona informó que la operación por Ney englobó unos 57,1 millones de euros (40 millones para su familia y 17,1 para el Santos), pero la Justicia estimó que fueron al menos 83 millones.

En tanto, para la empresa DIS, recibió 6,8 millones de euros de los 17,1 ingresados oficialmente al club brasileño, siendo estas cifras ocultadas por los clubes Barcelona y Santos.