El 17 de noviembre de 2021, semanas después de ser derrotado en las Legislativas, el Gobierno celebraba el Día de la Militancia. Y ante la Plaza de Mayo, el presidente Alberto Fernández sentaba posición respecto del debate que vendría: "Quiero que en 2023, desde el presidente al legislador, lo elijan los compañeros del Frente de Todos".

Con el debate instalado, el mandatario mantiene su idea. La reafirma en cada una de sus apariciones públicas y sus laderos se encargan de señalar que su eliminación no está prevista. Y que, además, su realización está contemplada en el Presupuesto. "Lo que yo quiero es que seamos capaces de tener un debate democrático interno, sin exclusiones y respetarnos", insistió esta semana Fernández, durante un reportaje concedido a radio El Destape. Fernández no sólo sostiene una idea. También busca mantener vivo su proyecto de reelección. Sin primarias, ¿podría presentarse como candidato del Frente de Todos? Las últimas encuestas arrojan una respuesta terminante.

Eliminar las PASO fue una idea que impulsaron los gobernadores para allanar el camino a la reelección en sus provincias. Luego se sumó el kirchnerismo. Es que su derogación le daría la posibilidad de imponer un candidato. Accionista mayoritaria de la coalición de gobierno, esa decisión quedaría en manos de la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner. También beneficiaría a Axel Kicillof en provincia de Buenos Aires.

"Que el Presidente compita en una PASO sería, por lo menos, extraño", planteó el legislador oficialista Máximo Kirchner. Sus gestos cuando le preguntaron si entonces Alberto Fernández debía ser el único candidato dejaron en claro lo que piensa un sector del Gobierno. Teresa García, referente del kirchnerismo en la Provincia de Buenos Aires, le puso palabras a esos ademanes: "La sociedad le dijo que no a Alberto Fernández".

Gobernadores e intendentes intentan "convencer" al Presidente. Lo reveló Eduardo 'Wado' de Pedro. "Se manifestaron a favor de que no haya cuatro elecciones en un año", presionó el referente de La Cámpora.

La posibilidad de definir candidaturas es el dique de contención para evitar una fractura en la principal coalición opositora. Atravesado por diferencias que por momentos lucen irreconciliables, Juntos por el Cambio vuelve a mostrar unidad para rechazar la derogación de las primarias.

Sostienen que no se pueden cambiar las reglas de juego en medio del proceso electoral y aseguran que se trata de una maniobra del Gobierno para evitar una "paliza" en 2023.

"Tienen miedo a la voz del pueblo. Lucharemos para defender la democracia", avisó el diputado radical Mario Negri. Tal vez ese "miedo" también aceche al frente opositor.

¿Cómo dirimir sus diferencias sino con internas con reglas claras? En PRO, los 'halcones' parecen haber ganado la partida a las 'palomas'. Y la UCR se corre cada vez más al centro. Quedó demostrado en la discusión del Presupuesto. ¿Hay 2023 para JxC sin PASO? "Si no somos capaces de solucionar este obstáculo, no podríamos estar en condiciones de gobernar", advirtió Negri.

El debate está instalado. El Frente de Todos intenta llegar a un acuerdo y en la oposición hacen números. Porque esta semana ingresó en Diputados un proyecto que propone eliminar las PASO. Se trata de una iniciativa presentada por el Interbloque Federal, asiduo aliado del Frente de Todos. ¿Es posible reunir los 129 votos necesarios para apobarla?

En un eventual escenario de unidad, el Frente de Todos contaría con 117 votos -sin contar a la titular de la Cámara, Cecilia Moreau, que votaría en caso de empate-. Resultarían entonces determinantes los votos de otros legisladores. En ese caso, el oficialismo podría contar como positivos los votos de los cuatro diputados de Provincias Unidas; los tres de Córdoba Federal; y el único voto del Movimiento Popular Neuquino. Podría sumar, además, otros tres aliados: liberales encabezados por Javier Milei.

Quedaría así a un solo voto de su objetivo. Con el bloque de José Luis Espert afuera de la discusión (el economista calificó como "mamarracho" querer eliminar las PASO), el Frente de Todos iría en busca de los votos de la Izquierda. Ese espacio siempre cuestionó el umbral de 1,5% que exige la ley vigente para competir en las generales, pero recurrió a las internas en la última elección. Por lo tanto, es difícil determinar qué postura adoptarán.