Hoy se cumplen 26 años del peor atentado terrorista que sufrió nuestro país. EL 18 de julio de 1994 a las 9.53 de la mañana, una traffic blanca explotó frente a la AMIA provocando 85 muertos, decenas de heridos y destrozos. 

La causa AMIA sigue impune. Según la Justicia Argentina, el atentado fue ejecutado por el grupo militante chiita Hezbolá, de origen libanés, bajo órdenes de Irán, algo que ese país siempre ha negado. Ningún sospechoso ha sido juzgado o arrestado.  El caso se ha transformado en un símbolo del manejo político sobre el aparato de inteligencia y la justicia para encubrir o desviar una investigación.