Simón Natanael Alvarenga tiene 27 años y desde hace más de 10 viene creciendo en el mundo de la música. Se alejó del fútbol para inclinarse 100% a la música y convertirse en Callejero Fino.

"Yo creo ue la ausencia de mi papá fue lo que generó como un un click de rebeldía. Todo lo que era un "no" se transforma en un sí. Yo me preguntaba: '¿por qué? si estaba todo bien. ¿Por qué se murió mi papá?'. Él era mi mejor amigo, hablábamos un montón", contó sobre la pérdida de su padre.

El artista sostuvo que él no le tiene miedo a morirse: "A lo único que le temo es a que  se olviden de mí. Por eso hago música y me parece que de esa manera voy a quedar plasmado para siempre. Más que nada para mi hijo. Para mi familia. Voy a quedar ahí. Siempre voy a estar vivo porque me van a poder escuchar siempre".

Fue condenado a prisión domiciliaria por seis años y tras su salida tocó en el Luna Park: "Mi jueza me comentaba que soy un caso único en la historia Argentina. No existe alguien que haya estado preso, le den una pulsera y haya seguido con su carrera. Encima salgo y hago un Luna Park. Es re loco. Yo re agradecido con la gente, no me lo imaginé nunca. Como te decía antes de arrancar, nunca me imaginé que iba a estar acá. Estas entrevistas yo las veo y me encanta, me emociono un montón".

Su paso por la cárcel le dejó recuerdos: "Hay pibes que son primarios y otros que son reincidentes. Por estar dolidos por el trato, van tomando ese rencor y de querer lastimar a un primario y no enseñarles las cosas de cómo es la cárcel, porque tiene una manera de manejarse particular y todos forman parte de ese sistema". El artista jamás contó los motivos de su condena: "Es algo que me  gustaría hablar más que nada con mi mamá, que todavía no lo hablé. Yo hace poco salí en libertad y literalmente, realmente de corazón, no me acuerdo. Tengo como flashes que se vienen a la cabeza". "Antes no me arrepentía de nada, pero sé que lastimé un montón a mi mamá y estoy arrepentido por haberla hecho llorar y no reir".

Era cercano a El Noba y habló sobre su vínculo: "Hablábamos un montón. Compartimos varias veces, tomamos mate con mi mamá. Lauti siempre tenía luz, era una masa. No quiero hablar mucho por respeto a la familia, pero a mí me demostró que era de verdad un pibito bueno y piola".

Si vamos a la caja negra de su vida, ¿cuál es el momento que lo convierte en Callejero Fino?: "Yo creo que cuando le pregunté a mi mamá si la música en algún momento me iba a dejar plata y me respondió: '¿Tenés dudas?'. Ahí creo que me potencié por mil".

Hacia el final de la entrevista se abre la caja negra. Comienza un desafío inesperado. Semana a semana una figura se someterá al living para dialogar y reflexionar. Y vos, ¿te animás a recordar qué momento hizo un click en tu vida?