Lilita Carrió viajó a Lomas de Zamora, donde encabezó un nuevo acto en el cierre de las campañas electores por la presidencia de la nación y la Provincia de Buenos Aires. Para eso, saben que desde el 11 de agosto hasta ahora, muchas cosas deberán revertirse y por eso les habló del pasado para que recuerden lo vivido hasta la lega de Vidal.

"En el conurbano hay miedo. Cómo hacemos para reconvertir el miedo en fe y evitar que vuelvan a los brazos de los que los van a maltratar toda la vida es la gran cuestión de hoy". "No sé si se puede resolver en tres semanas, pero puede haber milagro, porque lo hubo una vez, pero para eso se necesita la fe de ese 40% que quiere que gane Cambiemos", sentenció.

"Se necesita la fe y el acompañamiento a una mujer extraordinaria que ha dado todo", explicó Carrió sobre el trabajo de María Eugenia Vidal en estos últimos cuatro años, luego de haber desbarrancado al peronismo con la victoria sobre Aníbal Fernández en 2015. Por eso mismo, volvió a remarcar en el pasado.

"No les vine a pedir el voto, les vine a pedir que trabajen por su dignidad y por la dignidad de la provincia de Buenos Aires. Hay una oportunidad para no volver al pasado, para avanzar no hay que dar un paso para atrás, hay que seguir trabajando", sentenció la diputada nacional, que estuvo acompañada por Héctor "Toty" Flores, Mariana Zuvic y Gabriela Bessana, entre otros.