Tal como estaba previsto, la senadora Cristina Fernández de Kirchner ingresó minutos después de las 9.30 a los tribunales de Comodoro Py para declarar como acusada en la causa por el supuesto direccionamiento de la obra pública vial en Santa Cruz.

En las inmediaciones de los tribunales la aguardaban varios dirigentes del peronismo y referentes de organismos de derechos humanos. Están Estela de Carlotto, Tati Almeyda, Nora Cortiñas y Lita Boitano, quien le expresaron su apoyo.

Más temprano, la vicepresidenta electa volvió a insistir hoy con un planteo al Tribunal para televisar en vivo la audiencia en la que prestará indagatoria, algo que los jueces finalmente rechazaron.

"Mi solicitud no persigue un beneficio personal, sino se dirige a satisfacer el enorme interés que naturalmente suscita la declaración en juicio de quien ha ocupado en dos oportunidades la Presidencia de la Nación y ahora ejercerá la Vicepresidencia de la Nación, por decisión del voto popular de los ciudadanos de nuestro país", expresó Cristina.

El planteo lo hizo a través de un escrito presentado por su abogado, Carlos Beraldi, en los tribunales de Comodoro Py 2002, donde pasadas las 7.30 se implementó un fuerte operativo de seguridad.

"No se advierte ni se ha justificado por qué razón la autorización requerida por mi parte implicaría un trato indebido o inequitativo para los restantes acusados".

El abogado Beraldi sostuvo que "este juicio viene revistiendo gran trascendencia a través de los medios de comunicación, que dieron a conocer las declaraciones indagatorias prestadas en autos".

"Ergo, han acaecido circunstancias novedosas que demuestran que la exclusión de las declaraciones prestadas carece del fundamento" que se tuvo en cuenta con anterioridad, agregó.

El defensor había adelantado que, en caso de recibir una nueva negativa -cosa que ocurrió-, recurrirá a la Cámara Federal de Casación y a la Corte Suprema de Justicia.

"Ni el Tribunal requirió ni ninguna defensa manifestó una opinión adversa a que se transmitiera en vivo la declaración de la Dra. Cristina Fernández de Kirchner. Por ende insinuar que alguna de ellas podría oponerse a mi solicitud es una mera suposición", agregó.

La ex presidenta está procesada como supuesta jefa de una asociación ilícita en esta causa en la que es juzgada junto al empresario detenido Lázaro Báez, a cuyas empresas, según la acusación, se habría direccionado el 80 por ciento de la obra pública en Santa Cruz durante el kirchnerismo.

La vicepresidenta electa cierra la ronda de declaraciones indagatorias y luego el Tribunal empezará a escuchar a los testigos.