Pese a que los perros del mundo ya tienen un día especial que es el 21 de julio y pese a que cada 28 de mayo se festeja el Día del Perro sin Raza -para generar conciencia y fomentar la adopción-m, el 2 de junio se celebra en nuestr país el Día Nacional del Perro. Se eligió la fecha para rendirle homenaje a Chonino, un perro policía fallecido en 1983. 

Este ovejero alemán nació en abril de 1975 y dos años después fue reclutado por la División Canes de la Policía Federal Argentina. Fue entrenado como perro de seguridad y clasificado como perro de presa -sólo podía atacar cuando había peligro de vida para sus amos o terceras personas- y formó parte de la seguridad del partido inaugural del Mundial de Fútbol de 1978, en Buenos Aires.

Un día como hoy pero de junio de 1983, Chonino y otro perro acompañaban en la realización de sus tareas a los suboficiales Luis Sibert y Jorge Iani por el barrio de Villa Devoto. A la altura de las avenidas General Paz y Lastra los policías observaron a dos sospechosos, a quienes les exigieron su documentación. Ellos se negaron y comenzó un tiroteo. En medio de los disparos uno de los policías resultó herido.

En defensa de su guía -y de su deber- Chonino se abalanzó contra el agresor, y al hacerlo, el otro hombre implicado le disparó. Como consecuencia Chonino murió y apretaba entre sus mandíbulas un trozo de la campera del delincuente al que atacó: era el bolsillo de su gamulán y en su interior estaban los documentos que lo identificaban por lo que fueron detenidos 5 días después en la provincia de Buenos Aires.

Actualmente los restos de Chonino descansan en el Círculo de la Policía Federal Argentina y los de su guía Luis Alberto Siberto, fallecido 25 años después del lamentable hecho, el 13 de diciembre de 2007, en el Cementerio de la Chacarita.

En su memoria, a pedido de la periodista y escritora Cora Cané, desde 1996 el 2 de junio se conmemora en Argentina como el "Día Nacional del perro". Además, se le rinden otros homenajes: en el predio de la Policía Montada levantaron una estatua de bronce en su memoria; la División Perros de la Policía Federal Argentina rinde cada año un homenaje a Chonino y lo hace extensivo a todos los perros de la fuerza.

Paralelamente la Ciudad Autónoma de Buenos Aires denominó al pasaje que corre entre la Avenida Casares y la Avenida Jerónimo Salguero, en los fondos del predio de la Policía Montada, con el nombre de Chonino.

"Dio su vida por salvar a su guía y amigo", reza una de las placas que lo recuerdan en los bosques de Palermo.