El lujoso Palacio Bosch , sede de la residencia de la embajada de Estados Unidos en Argentina, se convirtió en "Rancho Bosch", según las propias palabras del embajador Edward C. Prado, al conmemorar un nuevo 4 de julio, el Día de la Independencia norteamericana.

"Me animo a decir sin reservas que la relación nunca ha sido más fuerte que hoy", aseguró el diplomático en su mensaje como anfitrión de una celebración a la que concurrieron funcionarios del Gobierno, dirigentes políticos, jueces, empresarios, otros embajadores y artistas.

Entre los presentes se destacó la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, quien posó junto a Prado vestida de vaquero.

También asistió al banquete su par bonaerense, Cristian Ritondo, estrenando además su rol de precandidato a diputado nacional, al frente de la lista de Juntos por el Cambio en la provincia.

Otro precandidato presente en el Palacio Bosch fue José Luis Espert. El economista, que acaba de lograr la autorización para competir por la Presidencia, llegó acompañado por su compañero de fórmula, Luis Rosales.

Esta vez la fiesta fue temática, organizada por el estado de Texas y la Embajada lanzó una consigna: vestirse con look del lejano oeste: pantalones y campera de jean, botas y sombrero texanos.

Aunque hubo varios de los asistentes que no cumplieron con la recomendación. Entre ellos varios funcionarios judiciales, como el juez federal Sebastián Casanello y el juez de la Cámara Federal de Casación Gustavo Hornos.

Otros de los presentes fueron el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, el empresario y banquero Jorge Brito, el economista Martín Redrado, el diputado "amarillo" de Salta, Alfredo Olmedo, el presidente de YPF, Miguel Gutiérrez, el jefe de la Policía Federal, Néstor Roncaglia y la escritora María Kodama, viuda de Jorge Luis Borges.