Ir al contenido
Logo
Actualidad #Lali esposito#caja negra

Lali: "El gran enemigo hoy es la ansiedad"

La cantante y actriz es la nueva invitada de Caja Negra, el ciclo de entrevistas de Filo.News conducido por Julio Leiva.

Lali: "El gran enemigo hoy es la ansiedad"
Lali en Caja Negra

Mariana Espósito, más conocida como Lali, es la nueva invitada de Caja Negra, el ciclo de entrevistas de Filo.News conducido por Julio Leiva. 

En medio de la cuarentena por coronavirus, la actriz y cantante se sometió a un filoso reportaje en el que habló de su carrera profesional tanto en la música como en la actuación, los trastornos de ansiedad, 'Casi Ángeles', 'Esperanza Mía' y mucho más.

"Las novelas tienen mesetas, que son momentos de entendimiento de qué le pasó a un personaje para ir hacia lo que le va a pasar. Yo me siento en esta etapa, que viví mucho; los primeros capítulos fueron intensos y ahora estoy en un gran capítulo que te sigue manteniendo enganchado, pero viendo qué viene. Es un lindo momento, estoy en la búsqueda del conflicto nuevo. Ahora estoy encarando la etapa final de un nuevo disco y rodando una serie", resume la artista de 28 años.

Sobre la cuarentena -que está pasando con su pareja Santiago Mocorrea- dice: "Tuve suerte de pasarla en mi casa, con mis cosas, con mi novio que es al único ser que veo. Solo de imaginarme en un departamento sola, en otro país, a pesar de que España es una maravilla, estaba muy picante".

"Lo que estamos viviendo es una situación muy extraña, me parece raro no saludar o acercarme. Va a haber que ser muy conscientes, pero somos seres del amor y nos costará mucho a respetar el espacio con el otro. Es una prueba interesante para nosotros como sociedad", agrega.

Y sigue: "Yo voy al supermercado cerca de casa, que es la única salida que tengo, y la vivo como si fuera ir al boliche el sábado. Voy por la góndola a full y me cruzo con gente que me conoce, extraños y uno se relaciona. Habrá que ver cómo avanza todo esto".

Antes del brote de Covid-19, Lali se encontraba en España rodando la nueva tira de Netflix en la que participa titulada 'Sky Rojo': "Estando allá había una sensación muy humana, todos seguíamos con nuestras vidas y nuestro ritmo, y el coronavirus nos pedía frenar un poco. Nos faltaba el click, no sé si estábamos tan conscientes. La producción de la serie que estaba grabando dijo de parar dos semanas y yo pedí que me dejen volver a casa, a ver a mi familia y vuelvo. Pero esas dos semanas se hicieron estos dos meses".

"No sé qué pasará con la serie. Es una serie muy física, tiene muchas escenas de sexo, mucho contacto, no sé cómo se podrá resolver por guión. Iremos viendo cómo se desarrolla esta nueva forma de relacionarnos", añade al respecto.

Sobre su personaje, apunta: "Encarnar una prostituta tiene su dificultad. Pero la trata de personas es otra cosa, de otro nivel, es algo súper dark y muy jodida. Para esto nos han preparado mucho a mí y a mis compañeras. Hemos leído mucho, nos dieron mucha información para encarnar los personajes".

"La serie va a generar mucha controversia. Me parece genial discutir las cosas y que una serie que haga discutir y pensar a una pareja. La trata de personas todos sabemos que está, pero nadie dice nada ni se hacen series. Nos la jugamos a tope con esta serie porque se pone polémica y abre todos los frentes", suma.

En esta línea, abrió pase al debate sobre el trabajo sexual y el abolicionismo: "Partiendo de la base de que hay gente que sufre, que no elige y es víctima de un sistema y una red espantosa, es muy jodido poder opinar. Hay madres que perdieron sus hijas en redes de trata, hay mujeres que perdieron su vida. Como cualquier tema social que se pone en la mesa por primera vez o que no estamos acostumbrados a charlar, me parece que nadie tiene una postura, estamos como temerosos porque no sabemos realmente qué se siente estando de uno u otro lado. Es un tema en que soy un poco tibia, que en general no lo soy, pero creo que hay que ser respetuoso cuando no sabés realmente de algo. Mejor escuchar y con los años tratar de ir buscando mi punto".

"La gente más joven, muchas veces, es la que abre la puerta para naturalizar un montón de cosas, porque si pongo en la misma mesa a mi abuela y a una chica de 18 años, claramente habrá diferencias. Pero yo soy una persona abierta a escuchar y sentir. Hay cosas de la gente más joven que no me salen, que no entiendo. Estoy más cerca de los 30 y tengo otros conceptos y trato de sacarme de encima lo que me pone incómoda para sentirme más liviana", agrega.

En la entrevista, también habló sobre los privilegios de poder elegir la profesión: "La mayoría de la gente labura de lo que puede y no de lo que quiere. Si laburás de lo que querés sos un privilegiado y eses privilegio aprendés a llevarlo con los años".

La deconstrucción es otro de los tópicos abordados: "Nos pasa que cuando vemos cosas que hicimos hace años, nos decimos ‘¡Qué machirulas lo que decíamos acá!' y nos reímos. Está bueno verse evolucionado, todos, desde los guionistas a los actores y decirnos ‘mirá qué bien que hoy podemos darnos cuenta que eso no estaba bueno’. Ver los programas pasado el tiempo, me siento muy afortunada de haber sido parte. Tanto por lo que aprendí a nivel laboral y humano, es un trabajo que te eyecta al mundo".

De ese pasado, recordó su paso por dos programas clave en su carrera actoral:

  • Casi Ángeles: "No sería difícil poner a esos jóvenes de ‘Casi Ángeles’ en la actualidad que estamos viviendo. Contaríamos otras cosas porque el mundo cambia y por suerte abrimos la cabeza. Creo que podría suceder, no veo conflictivo traer eso [...] Éramos un grupo humano súper consciente. La mayoría éramos personas que podíamos entrar a un hotel con 400 personas gritando y esa sensación de estrella y fama desaparecía cuando cruzábamos la puerta. No es que subestimamos, pero al toque había algo humano nuestro, mucha cultura del trabajo y mucho entendimiento de que eso en un momento iba a terminar y que la vida sigue. No nos hacíamos grandes rollos, salía al escenario y me cagaba de risa, me divertía"
  • Esperanza Mía: "Mi primera experiencia profesional como protagonista, al frente de un proyecto, fue en ‘Esperanza Mía’. Con este proyecto entendí muchas cosas y me cachetearon muchas cosas. El programa me dio popularidad, me reconocía la abuela y la nena de 4 años. Tuve un cachetazo artístico muy bueno, armarme el personaje que yo quería hacer y ver cómo funcionaba. Pero también tuve un cachetazo personal ese mismo año, en medio de ese éxito, que me ayudó a aprender que no todo lo que brilla es oro. Tenía una pareja con sus conflictos y eso salió para afuera y me angustió mucho. Aprendí que más allá de cualquier éxito, el éxito personal marca un poco todo, te da pena no poder recordar momentos de un éxito profesional con alegría porque vos estabas apagado".

Además de su carrera como actriz, Lali también habló sobre su pasado, presente y futuro musical: "Cuando saqué el primer disco, más allá del romanticismo de sacar el primer disco, en lo personal me dio mucha confianza. Fue un trabajo súper a pulmón, independiente. Cuando es un proyecto tuyo, sin personaje de por medio, es otra cosa. Todo lo que me animé a hacer, con mucho pudor, y la buena respuesta del público y colegas, esa confianza, me trajo hasta donde estoy hoy. Fue un re empujón personal y profesional".

"Sueño llegar con lo que haga a la mayor cantidad de gente posible. No por una cuestión de ego, sino porque significa que si hago algo en lo que creo y le gusta a la gente, somos más los que pensamos de esa manera y en ese disfrute. Quisiera ser una mega estrella de la música y la actuación. Siento de verdad que nací para entretener, necesito ver al otro entretenido. Tengo sueños y llegar lo más alto que pueda. Pero con el tema de la ansiedad, trato de vivir el día a día, que los sueños sean metas que me impulsen y no que me acobarden. La frustración está a la vuelta de la esquina", cuenta.

En cuanto a la ansiedad, Lali confiesa que la "sufre bastante" y que se encuentra "todo el tiempo haciendo ejercicios mentales para bajarla porque si no, termino no valorando nada".

"Me cachetea, hay días que digo 'che, está todo bien, mi vida está bárbara, mirá vos el laburo, estamos terminando el disco, está todo bárbaro' pero hay algo adentro que me tiene tan acelerada. Estamos todos medios viciados, todo es ya, todo es ahora". Y revela: "Para bajar la ansiedad, me invito a dar paso a paso. El trabajo diario es la única manera en que se llega a algo. A veces, en la industria de la música está la necesidad de imponerte lo que se considera que es un éxito. Y yo no creo para nada en eso, lo respeto, pero confío en mis decisiones del día a día".

"Le tengo mucho pánico al repetirme. Me pasa con la música, con la actuación, me pasa en la vida. Sentirme siempre en una misma sintonía, no me es cómodo. Siento que, si no lo hago, subestimaría a la gente", reflexiona antes de cerrar y adelantar que "este año tenemos disco nuevo seguro".

Hacia el final de la entrevista se abre la caja. Comienza un desafío inesperado. Semana a semana una figura se someterá al living para dialogar y reflexionar. Y vos, ¿te animás a recordar qué momento hizo un click en tu vida?

  • Lali esposito
  • caja negra