Trabajadores de la línea B de subte iniciaron esta mañana, a las 7, una protesta. Levantaron los molinetes de la estación Federico Lacroze como medida de fuerza para denunciar la presencia de asbesto en la red de subterráneo.

"En las últimas horas se confirmó la peor de las verdades: una decena de trabajadores afectados por el asbesto sobre una centena de exámenes", informaron los delegados gremiales en un comunicado. Pues se trata de un material cancerígeno que también podría afectar a los millones de usuarios que utilizan este medio de transporte.

"La red de subterráneo está contaminada con este material cancerígeno que está prohibido desde el año 2001", detallaron y exigen a Metrovías y al Gobierno de la Ciudad una solución integral e inmediata.

La medida perdurará hasta las 9:00 de la mañana.