Hay historias que destacan por sus matices llamativos y suenan difíciles de creer cuando, en los detalles, se revelan algunos componentes insólitos. Una de esas es la captura de este delincuente, que parece el guion de una hilarante película, luego de su intento de huida a bordo de un taxi con el premio mayor de casi cinco millones de pesos.

Así fue que este viernes, las calles Tucumán y San Martín del microcentro de la Ciudad de Buenos Aires fueron el escenario del robo que perpetraron dos hombres en moto cuando interceptaron a sus dos víctimas y le robaron su mochila a uno de ellos. Aparentemente, dos hombres más acompañaban a los malvivientes observando la secuencia delictiva desde la esquina, a modo de apoyo, según contaron los propios perjudicados por el robo.

Durante las últimas horas, se reveló el desarrollo de los hechos, que empezaron cuando uno de los motochorros bajó del vehículo, asestó un golpe a la cabeza de una de las víctimas y le arrebató la mochila en la que llevaba la suma de $4.966.180 para luego darse a la fuga en la motocicleta junto al conductor. Alertados acerca del hecho, efectivos de la División Motorizada de la Comisaría Vecinal 1A de la Policía de la Ciudad empezaron un operativo para atrapar a los delincuentes. 

El detalle que resuelve la historia es que, luego de iniciar el recorrido por la zona en búsqueda de los motochorros, los policías pudieron guiarse a partir de un teléfono celular con GPS que estaba dentro del bolso robado, de lo que el delincuente que huía nunca se percató y que fue la sentencia final de su detención. En ese sentido, los efectivos contaron con la colaboración del personal de Avenidas Céntricas e identificaron al sospechoso, quien iba a bordo de un taxi al que había subido en la esquina de avenida Ramos Mejía y Antártida Argentina, en el barrio de Retiro.

Al realizar la detención, los policías pudieron recuperar el dinero en su totalidad, el cual estaba destinado al pago de sueldos de una empresa de transporte de la ciudad de Junín. Por su parte, el taxista que estaba transportando al sospechoso declaró ante las autoridades que vio al pasajero bajar de una moto, pero que jamás se le pasó por la cabeza que venía de cometer un robo.

El acusado de cometer el ilícito, de 32 años, fue trasladado a la comisaría correspondiente por el delito de “robo” bajo la modalidad de arrebato tras la intervención en la causa del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 8, a cargo de Yamile Bernan.