El canciller de México, Marcelo Ebrard, confirmó este martes en conferencia de prensa que el operativo de rescate de Evo Morales y el ex vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, obligó a la intervención de funcionarios y  diplomáticos de Perú, Paraguay, Ecuador y Brasil, además de la colaboración del Presidente electo de Argentina, Alberto Fernández.

"La aeronave bajó en Lima, Perú, como primer punto de contacto", informó el ministro mexicano y agregó que allí debió aguardar para conseguir las autorizaciones para aterrizar en Bolivia "porque no está claro quién decide qué".

Al final del día, según contó, cuando el avión de la Fuerza Aérea de México llegó al espacio aéreo boliviano, le informaron que el permiso con el que contaba, asignado horas antes, ya no era válido. "Entonces hubo que retornar a Lima y esperar varias horas", consignó.

"Finalmente, el Comando de la Fuerza Aérea de Bolivia otorgó el permiso para que pudiéramos ir. Llegamos al aeropuerto donde esta esperándonos Evo Morales", siguió Ebrard quien remarcó una vez más que en ese país "el orden constitucional está interrumpido".

"En el aeropuerto donde estaba Evo Morales había una situación muy difícil. Primero porque sus seguidores estaban allí y en el interior del lugar había elementos de las Fuerzas Armadas".

Reveló además que hablaron con el Gobierno de Paraguay y "nos ayudó mucho el Presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, a quien agradezco su gentileza porque él habló con el Presidente de Paraguay, Mario Abdo".

Agregó que Paraguay autorizó que el avión de México hiciera escala en Asunción para recargar combustible. "Luego, hablar con el canciller de Ecuador, a quien hicimos consultas para aterrizar en Guayaquil en caso de que fuera necesario", contó.

Dijo además que por la noche, Bolivia no autorizó que el avión sobrevolara nuevamente su espacio aéreo en la ruta de regreso desde Paraguay camino a México, por lo que intervino el embajador de Brasil en La Paz quien intervino para poder volar en la línea fronteriza entre Bolivia y Brasil". 

El último tramo del vuelo, según informó el canciller mexicano, se está haciendo sobre aguas internacionales por lo que no esperan más contratiempos.

"Es como un viaje por la política latinoamericana, cómo se toman las decisiones y los riesgos que se corren".

Ebrard dijo además que no espera ningún reclamo por parte del Gobierno de Estados Unidos por otorgar el asilo político a Evo Morales y destacó que la relación entre México y la administración de Donald Trump "está en uno de los mejores momentos de los últimos años", así como la comunicación entre ambos países.

Más temprano, en declaraciones a Radio 10, el presidente electo Alberto Fernández consideró hoy que "es una vergüenza discutir si es golpe de Estado o no" lo sucedido en Bolivia y advirtió que la crisis institucional que afecta al país del Altiplano es "definitivamente mala para el continente". 

"Tampoco comparto lo dicho por el Departamento de Estado de los Estados Unidos, no hay ningún ejército victorioso, no es verdad que el Ejército de Bolivia haya garantizado la democracia, en todo caso la impidió", dijo.

"Gracias a Dios hemos rescatado con vida a Evo, su vicepresidente, Álvaro García Linera, y sus ministros, que ahora están asilados", destacó Fernández.

Consideró además que la región debe garantizar la democracia en todos los casos y celebró que en Argentina se esté "transcurriendo la democracia en paz, y un traspaso de mandato en paz, porque eso es algo que habla de la madurez".