Santi Siri es el referente tecnológico de Argentina y para muchas generaciones será una de las grandes cabezas. Ahora, regresó al país luego de dos años para acompañar a Vitalik Buterin, creador de Ethereum, en su recorrida nacional, y se llevó una gran sorpresa por el presente en materia de cripto.

"No vine a Buenos Aires, sino que viajé en el tiempo y estoy en una especie de utopía ciberpunk en el año 2034, porque está todo el mundo mirando, está todo el mundo traideando criptomonedas", cuenta sorprendido sobre el avance que tiene la moneda digital y la enorme diferencia con otros países del mundo.

"Hay como un nivel de interés, no solamente en los desarrolladores, los que hacemos software, sino en la gente, en el gran público que consume y usa estas herramientas, que no lo he visto en otros lugares del mundo. No lo veo en España. Estamos a años luz de España", remarca y lo relaciona con la necesidad de avanzar del país.

"Son síntomas de un sistema que no funciona, un sistema tradicional, el Estado y nuestras instituciones que no logran hacer andar la economía. Todo eso está repercutiendo en que la gente está tomando cartas en el asunto, agarrando estas tecnologías, estas herramientas. Algunos están construyendo sobre esas otras, están usándolas. Pero hay un nivel de masificación en cripto que yo antes pensaba que Buenos Aires era siempre con orgullo, decía bueno", agrega.

"Argentina o Buenos Aires, al menos, es la capital cripto del mundo por excelencia, que contrario al caso del Salvador, donde hay un presidente milenial que ha hecho la adopción de Bitcoin y de cripto una cosa más de arriba hacia abajo y está tratando de impulsar cambios en ese sentido. Acá es además de abajo hacia arriba", remarca.

Por otro lado, no solo el interés de la gente ha despertado toda esta situación, sino que además hay un impulso desde las mentes argentinas, algo que Siri define como "una camada de emprendedores muy exitosa, que logró construir grandes compañías regionales que han ganado la Copa América, que han ganado los mercados latinoamericanos".

"Estamos realmente ante una generación dorada del software nacional, que es una historia muy breve, muy corta, pero que en este momento, a partir del auge de las criptomonedas y demás, realmente estoy orgulloso de ser parte de todo eso y de ver lo que lo que trato de decir mi generación", sorprende.

Otros temas que repasa dentro de la realidad actual de las cripto son las regulaciones e impuestos. Sin embargo, deja claro que parece imposible: "Cuando los gobiernos vengan a regularlo y lo van a nos van a perseguir, nos van a poner impuestos, regular cripto es como querer ponerle fronteras al mar no se puede, podes hacer puertos, no aduanas".

En este sentido, el creador/fundador del partido político Red cree que puede haber algo más para hacer en la política, sin convertirse en el centro del debate o el Congreso, sino fomentando normativas y educando. "Me apasiona la política porque creo que cuando hacemos tecnología las decisiones tecnológicas que tomamos tienen consecuencias políticas", destaca.

"Me parece que es indispensable tener una conciencia política a la hora de hacer tecnología y la verdad es que a mí me gusta sentarme y programar más que estar en el Congreso levantando el dedito y peleándome con la gente", cierra en una cátedra sobre el avance, el futuro y el mundo que se acerca con la revolución de la economía digital.