La presente se espera sea una semana difícil para el Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. El mandatario deberá afrontar, si bien su equipo legal ya anunció que no asistirá, la audiencia por el juicio político en su contra a tener lugar en la Cámara de Representantes. 

Pero la noticia, al menos para esta parte del globo no es esa, sino que desde su cuenta de Twitter, el referente del Partido Republicano publicó una serie de mensajes apuntando específicamente sobre los casos de Brasil y Argentina. 

Trump anunció desde esta vía la decisión, con vigencia inmediata, de restablecer las tarifas de acero y aluminio que ambos países exportan hacia los Estados Unidos. 

"Brasil y Argentina han estado presidiendo una devaluación masiva de sus monedas, lo cual no es bueno para nuestros agricultores. Por lo tanto, con vigencia inmediata, restableceré las tarifas de todo el acero y aluminio que se envíe a los EE. UU. desde esos países", partió por señalar el mandatario. 

En esta línea marca que "la Reserva Federal también debería actuar para que los países, de los cuales hay muchos, ya no se aprovechen de nuestro dólar fuerte al devaluar aún más sus monedas. Esto hace que sea muy difícil para nuestros fabricantes y agricultores exportar sus productos de manera justa". 

Así, una primera y pronta lectura permite observar dos intereses por parte del mandatario norteamericano. Por un lado, sobre el frente interno, un guiño a los agricultores. La campaña para las elecciones del año próximo ya arrancó. Por el otro, un posicionamiento ante el documento comunicado en la última Cumbre de los BRICS, con Jinping y Bolsonaro como firmantes de peso. 

De esta manera, Argentina pierde su condición "excepcional". Para mediados del año pasado, se habían cerrado las negociaciones entre el Gobierno nacional y el de los Estados Unidos para que el país sea exceptuado de los aranceles a la importación de acero (25%) y aluminio (10%).

Para Francisco Cabrera, el por entonces ministro de Producción y Trabajo, tanto "la relación del presidente Macri con el presidente Trump", así como que "Argentina es percibida por el Consejo de Seguridad Nacional como un país que promueve la integración y la democracia", habían sido claves para los mencionados avances. 

Así, tanto la Argentina como Brasil pierden un beneficio que también corre para Australia y Corea del Sur y que se encontraba sustentado en la sección 232 de la Ley de Expansión Comercial de 1962. 

Con ese anclaje, que si bien responde al contexto de la Guerra Fría, el magnate inmobiliario ha puesto a la seguridad nacional como argumento para las medidas proteccionistas desarrolladas desde su llegada a la Casa Blanca el 20 de enero del año 2017.